Pais: Chile
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Región: Metropolitana de Santiago
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Fecha: 2020-08-03
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Tipo: Prensa Escrita
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Página(s): A4
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Sección: Internacional
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Centimetraje: 28x27
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Pie de Imagen
Paneles fotovoltaicos en el Tenaska Imperial Solar Energy Center South, en California. En ese estado del suroeste estadounidense, siete proyectos de energías renovables fueron adjudicados entre abril y mayo, según un reporte del Instituto de Análisis Financieros y Económicos de Energía.
Cambios importantes en el consumo
La pandemia: Una fuente de oportunidades y desafíos para las energías renovables
El confinamiento ha provocado un aumento en su uso, pero la crisis económica amenaza las inversiones en el área.
Toda la atención mundial está puesta hace meses en la pandemia del covid-19 por las consecuencias sanitarias y económicas que ha tenido, pero el fenómeno ha generado cambios importantes en el consumo de energía y, al mismo tiempo, una caída en los precios del petróleo, que podrían marcar un antes y un después para las energías renovables.
Los precios del crudo se desplomaron este año. De los US$ 66 por barril que costaba a fines de 2019, el Brent —cuyo precio es referencia en Chile— cayó hasta US$ 18,5 en abril, su menor nivel desde junio de 1999. Desde entonces, y a medida que algunos países de Europa controlan sus niveles de contagio, ha recuperado parte de su valor, y el viernes pasado cerró en US$ 43,5. La recuperación, eso sí, no es segura por los rebrotes, y la francesa Total pronostica que cerrará el año con un precio de US$ 38 por barril.
Al mismo tiempo, la industria de las energías renovables ha avanzando con fuerza. Entre abril y mayo, se adjudicaron decenas de proyectos, según un reporte del Instituto de Análisis Financieros y Económicos de Energía. El informe destaca siete iniciativas aprobadas en California y, sobre todo, un megaproyecto solar de 1,5 gigawatt en Abu Dabi concedido a la francesa EDF y a la china Jinko Power. El consorcio ofreció cobrar US$ 13,5/MWh, un récord en la industria.
Los confinamientos han tenido un efecto importante también. Durante la cuarentena, Estados Unidos aumentó su consumo de energías renovables en 40% e India, en 45%, mientras que Italia, Alemania y España marcaron récords por la integración de energías verdes a la red. Este tipo de fuentes de electricidad representaron 44% de la red de toda la Unión Europea (UE) y de Reino Unido entre abril y junio —los meses de confinamientos más estrictos— según Wartsila, líder finlandés en tecnología energética. Esto se debe a la disminución de la demanda durante los períodos de cuarentena. La mayoría de las compañías eléctricas recurren a los suministros más baratos de energía cuando cae la demanda, por lo que los más costosos combustibles fósiles fueron los primeros en ser dejados de lado.
'La demanda por electricidad ha bajado menos que la de petróleo. El consumo de electricidad ha bajado entre 15% y 20% en muchos países a medida que empresas y oficinas cerraron, pero la caída en la demanda de combustibles para transporte fue mucho mayor. Hasta 60% en algunas partes', dijo a 'El Mercurio' Lisa Viscidi, directora del programa de Energía de Diálogo Interamericano.
En el plano político, los partidos ecologistas europeos han tenido un impulso este año. Los Verdes de Francia obtuvieron una enorme victoria en las elecciones municipales de junio y se quedaron con alcaldías importantes, como Marsella, Burdeos, Lyon y Estrasburgo. Mientras, en Irlanda, los ecologistas consiguieron el mejor resultado de su historia en las generales de febrero y acaban de aprobar entrar a una coalición para formar gobierno con los partidos Fine Gael y Fianna Fáil.
El enorme apoyo que recibieron los Verdes en Francia llevó a Macron a prometer una inversión de 15 mil millones de euros (unos US$ 16,9 mil millones) para enfrentar el cambio climático, como parte de su plan de recuperación pospandemia. Otros países, como Alemania y Reino Unido, también han hecho de la ecología uno de los focos de sus planes de recuperación: el primero comprometió US$ 46 mil millones a proyectos renovables para revitalizar su economía; el segundo, US$ 450 millones. En Corea del Sur, el gobernante del Partido Democrático espera usar su victoria en las elecciones de abril para impulsar su Nuevo Acuerdo Verde, que implica conseguir emisiones 0 para 2050.
Presión en contra
No todo es impulso a favor. La Agencia Internacional de Energía pronostica que este año la inversión global en energía, incluyendo las verdes, caerá 20%. Antes de la crisis sanitaria, las proyecciones eran que creciera 2%. No es solo a gran escala: la instalación de paneles solares y la compra de vehículos eléctricos caerá 'debido a que los compradores estarán bajo grandes presiones económicas', según la consultora Wood Mackenzie.
Por otro lado, la mayoría de los países que componen el G-20, entre ellos México, han puesto mayor énfasis en los combustibles fósiles que en los renovables en sus planes de recuperación, según Energy Policy Tracker, un sitio creado por un grupo de 14 ONG. Países como Filipinas han recibido críticas internas por ni siquiera considerar las energías renovables en su plan pospandemia.
'La industria de las energías renovables es menos volátil que la del petróleo, pero está completamente ligada a la vitalidad de la economía. En una crisis económica global, como una pandemia, las inversiones en energías verdes se ven amenazadas', dijo a este diario Justin Dargin, de la International Energy Foundation.
La industria también enfrenta problemas prácticos a raíz de la pandemia. Las grandes empresas manufactureras, el transporte de carga y la aviación, por ejemplo, que ya estaban teniendo dificultades para adaptarse a las nuevas formas de producir energía y para reducir sus niveles de emisiones, tendrán aún más problemas para hacerlo tras el embate económico de la pandemia.
A estas complicaciones se suma un tema que tradicionalmente ha dificultado la incorporación de energías verdes a las redes: el almacenamiento. Los vientos pueden perder fuerza y las nubes cubrir el sol, por lo que se deben tener grandes cantidades de energía guardada para poder usarla si no es posible producirla.
'Si queremos que la pandemia sea realmente una oportunidad, tiene que haber una expansión significativa de la infraestructura de transmisión y mejorar las tecnologías de almacenamiento', planteó Viscidi.
Recuadro
- Francia
El Presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha prometido una inversión de unos 16,9 mil millones de dólares para enfrentar el cambio climático, como parte de su plan de recuperación pospandemia.
Nex Prensa Escrita
Cambios importantes en el consumo
La pandemia: Una fuente de oportunidades y desafíos para las energías renovables
El confinamiento ha provocado un aumento en su uso, pero la crisis económica amenaza las inversiones en el área.
Toda la atención mundial está puesta hace meses en la pandemia del covid-19 por las consecuencias sanitarias y económicas que ha tenido, pero el fenómeno ha generado cambios importantes en el consumo de energía y, al mismo tiempo, una caída en los precios del petróleo, que podrían marcar un antes y un después para las energías renovables.
Los precios del crudo se desplomaron este año. De los US$ 66 por barril que costaba a fines de 2019, el Brent —cuyo precio es referencia en Chile— cayó hasta US$ 18,5 en abril, su menor nivel desde junio de 1999. Desde entonces, y a medida que algunos países de Europa controlan sus niveles de contagio, ha recuperado parte de su valor, y el viernes pasado cerró en US$ 43,5. La recuperación, eso sí, no es segura por los rebrotes, y la francesa Total pronostica que cerrará el año con un precio de US$ 38 por barril.
Al mismo tiempo, la industria de las energías renovables ha avanzando con fuerza. Entre abril y mayo, se adjudicaron decenas de proyectos, según un reporte del Instituto de Análisis Financieros y Económicos de Energía. El informe destaca siete iniciativas aprobadas en California y, sobre todo, un megaproyecto solar de 1,5 gigawatt en Abu Dabi concedido a la francesa EDF y a la china Jinko Power. El consorcio ofreció cobrar US$ 13,5/MWh, un récord en la industria.
Los confinamientos han tenido un efecto importante también. Durante la cuarentena, Estados Unidos aumentó su consumo de energías renovables en 40% e India, en 45%, mientras que Italia, Alemania y España marcaron récords por la integración de energías verdes a la red. Este tipo de fuentes de electricidad representaron 44% de la red de toda la Unión Europea (UE) y de Reino Unido entre abril y junio —los meses de confinamientos más estrictos— según Wartsila, líder finlandés en tecnología energética. Esto se debe a la disminución de la demanda durante los períodos de cuarentena. La mayoría de las compañías eléctricas recurren a los suministros más baratos de energía cuando cae la demanda, por lo que los más costosos combustibles fósiles fueron los primeros en ser dejados de lado.
'La demanda por electricidad ha bajado menos que la de petróleo. El consumo de electricidad ha bajado entre 15% y 20% en muchos países a medida que empresas y oficinas cerraron, pero la caída en la demanda de combustibles para transporte fue mucho mayor. Hasta 60% en algunas partes', dijo a 'El Mercurio' Lisa Viscidi, directora del programa de Energía de Diálogo Interamericano.
En el plano político, los partidos ecologistas europeos han tenido un impulso este año. Los Verdes de Francia obtuvieron una enorme victoria en las elecciones municipales de junio y se quedaron con alcaldías importantes, como Marsella, Burdeos, Lyon y Estrasburgo. Mientras, en Irlanda, los ecologistas consiguieron el mejor resultado de su historia en las generales de febrero y acaban de aprobar entrar a una coalición para formar gobierno con los partidos Fine Gael y Fianna Fáil.
El enorme apoyo que recibieron los Verdes en Francia llevó a Macron a prometer una inversión de 15 mil millones de euros (unos US$ 16,9 mil millones) para enfrentar el cambio climático, como parte de su plan de recuperación pospandemia. Otros países, como Alemania y Reino Unido, también han hecho de la ecología uno de los focos de sus planes de recuperación: el primero comprometió US$ 46 mil millones a proyectos renovables para revitalizar su economía; el segundo, US$ 450 millones. En Corea del Sur, el gobernante del Partido Democrático espera usar su victoria en las elecciones de abril para impulsar su Nuevo Acuerdo Verde, que implica conseguir emisiones 0 para 2050.
Presión en contra
No todo es impulso a favor. La Agencia Internacional de Energía pronostica que este año la inversión global en energía, incluyendo las verdes, caerá 20%. Antes de la crisis sanitaria, las proyecciones eran que creciera 2%. No es solo a gran escala: la instalación de paneles solares y la compra de vehículos eléctricos caerá 'debido a que los compradores estarán bajo grandes presiones económicas', según la consultora Wood Mackenzie.
Por otro lado, la mayoría de los países que componen el G-20, entre ellos México, han puesto mayor énfasis en los combustibles fósiles que en los renovables en sus planes de recuperación, según Energy Policy Tracker, un sitio creado por un grupo de 14 ONG. Países como Filipinas han recibido críticas internas por ni siquiera considerar las energías renovables en su plan pospandemia.
'La industria de las energías renovables es menos volátil que la del petróleo, pero está completamente ligada a la vitalidad de la economía. En una crisis económica global, como una pandemia, las inversiones en energías verdes se ven amenazadas', dijo a este diario Justin Dargin, de la International Energy Foundation.
La industria también enfrenta problemas prácticos a raíz de la pandemia. Las grandes empresas manufactureras, el transporte de carga y la aviación, por ejemplo, que ya estaban teniendo dificultades para adaptarse a las nuevas formas de producir energía y para reducir sus niveles de emisiones, tendrán aún más problemas para hacerlo tras el embate económico de la pandemia.
A estas complicaciones se suma un tema que tradicionalmente ha dificultado la incorporación de energías verdes a las redes: el almacenamiento. Los vientos pueden perder fuerza y las nubes cubrir el sol, por lo que se deben tener grandes cantidades de energía guardada para poder usarla si no es posible producirla.
'Si queremos que la pandemia sea realmente una oportunidad, tiene que haber una expansión significativa de la infraestructura de transmisión y mejorar las tecnologías de almacenamiento', planteó Viscidi.
- Francia
El Presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha prometido una inversión de unos 16,9 mil millones de dólares para enfrentar el cambio climático, como parte de su plan de recuperación pospandemia.
Pais: Chile
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Región: Metropolitana de Santiago
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Fecha: 2020-08-03
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Tipo: Prensa Escrita
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Página(s): A4
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Sección: Internacional
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Centimetraje: 28x27
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