Pese a la pandemia y a los efectos económicos de la crisis sanitaria, el sector energético ha mantenido un fuerte impulso en lo que va del año, tanto en los proyectos en construcción, como en los tramitados ambientalmente. En total, según las cifras del Gobierno, existen unos US$ 40 mil millones de inversiones en proyectos del área si se suma generación, transmisión y distribución, en sus diferentes etapas de desarrollo.

'El sector ha estado muy dinámico, atrayendo inversión extranjera y local, y a pesar de que el contexto es difícil, se ha mantenido un impulso importante, que demuestra que hemos seguido acelerando. Son números bien impresionantes', sostiene el ministro de Energía, Juan Carlos Jobet.

Tal ha sido el crecimiento, que las cifras acumuladas al mes de agosto revelan que han iniciado su tramitación ambiental 237 iniciativas, lo que representa un alza de 66% en comparación a lo visto en todo 2019 completo, lo que llevado a inversiones comprometidas, se trata de casi US$ 18 mil millones.

'Es difícil proyectar un número en específico, porque cada compañía va ingresando y avanzando etapas a su ritmo, pero vemos mucho interés por Chile, muchas compañías preguntan por el potencial mirándolo como destino de posibles inversiones y nosotros estamos confiados de que vamos a seguir tirando el carro en la recuperación, atacando al desempleo y atrayendo inversión a las distintas regiones', explica Jobet.

La autoridad apunta que para el desarrollo del sector han sido claves las ventajas competitivas el país, pero además, la estabilidad del área energética, incluso con las modificaciones que se han realizado en los últimos años. Es por eso que enfatiza que para seguir esa senda en necesario mantener el diálogo y buscar consensos entre todos los actores.

'Tenemos que ser capaces de dibujar juntos una mirada a largo plazo, porque es la única manera de que la solución resulte todo lo buena que se pueda, pero además, es esencial para que esa visión tenga soporte y apoyo de todos los actores, para ser sostenible en el tiempo', explica la autoridad, que adelanta que esta semana ingresará al Congreso la esperada reforma a la ley de distribución, iniciativa que busca generar mayor competencia en el sector y reducir los costos de las tarifas.

En las reuniones que ha sostenido con inversionistas extranjeros, Jobet revela que además de la oportunidad de desarrollo en energías renovables e hidrógeno verde, se destaca la situación fiscal sana del país, la estabilidad y la claridad de las reglas, pero también se nombra el plebiscito constitucional que se realizará el próximo mes.

'Los inversionistas entienden que en octubre se abre un desafío importante, que Chile es un país que pasó de ser pobre, a uno de ingreso medio y que tiene un desafío de transición hacia una nueva fase de desarrollo. En general, entienden este fenómeno que no es único de Chile, y confían en la capacidad del país de resolver esta tensión. Si damos señales de que podemos ponernos de acuerdo, vamos a salir fortalecidos de esto', asegura.

Hidrógeno verde

Otro de los focos que está impulsando la cartera de Energía es el hidrógeno verde, con el objetivo de que Chile sea una potencia de aquí a 2030 aprovechando el potencial que otorgan las fuentes renovables.

Durante las últimas semanas, Jobet ha sostenido reuniones virtuales con actores de la industria global y se han cerrado importantes paquetes económicos para impulsar estudios al respecto, los que han contado con la participación del BID y de la Unión Europea, y que se suman a los planes de la Corfo en cuanto a mecanismos de cofinanciamiento para proyectos de hidrógeno verde, para así fomentar el desarrollo de la industria.

'Con el hidrógeno está la tentación de que como es un tema nuevo, el Gobierno se lleve el tema como propio, lo que es un error, por eso convocamos a una comisión en la que participan el expresidente Lagos, Marcelo Mena, Vivianne Blanlot, entre otros; es un ejemplo de una visión amplia y compartida. Esa manera de hacer las cosas es una señal de tranquilidad para los actores, no son ideas de un gobierno, sino que de un país que se ha sostenido en el tiempo', asegura el ministro, que apunta a que las expectativas a 2030 son contar con un nivel de exportaciones similar al de la industria del cobre, en torno a los US$ 30 mil millones.

Actualmente, una comisión transversal está trabajando en la política más adecuada para desarrollar esta industria, estrategia que será revelada a comienzos de noviembre.