Aunque hace una semana se realizó el cambio de huso horario en el país, son muchos los chilenos que no se han acostumbrado.

Y es que según explica Claudio Acosta, académico de la Escuela de Psicología de la Universidad Bernardo O'Higgins, la adaptación podría durar dos semanas, porque el cambio de hora impacta directamente al ciclo circadiano (reloj biológico), que es el que regula funciones naturales como el sueño. De esta manera, la "desadaptación" puede expresarse como irritabilidad, una caída en el estado anímico e incluso en una disminución del rendimiento físico e intelectual, como la falta de concentración.

En este aspecto, hace énfasis en que estos signos no deberían ser tan exacerbados y que "anormal sería si los episodios persistieran más de dos semanas, ya que pasaría a ser un tema más complejo en el que habría que consultar aun especialista en neurología o psicología".