Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2019-07-14
Tipo:   Suplemento
Página(s):   7
Sección:   Suplemento
Centimetraje:   32x24

Pie de Imagen
Una imagen del encuentro desarrollado en 1997 que derivó en el protocolo de Kioto.
La Tercera - Reportajes
La historia de acuerdos y desacuerdos de la COP
Si bien la cita planetaria sobre cambio climático busca solucionar los problemas causados por la contaminación, el método para lograrlo ha estado marcado por un camino de consensos, pero también de divergencias.
La COP, tal como el fenómeno del cambio climático, es una iniciativa relativamente nueva dentro del mundo del Derecho Internacional. No fue hasta comienzos de los 90, cuando la evidencia científica mostraba claramente el efecto de la contaminación en el aumento de las temperaturas. La toma de acciones, en ese sentido, se hizo bastante urgente. Fue en 1992 cuando, durante la realización de la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro, se ordenó la creación de la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático.

Este nuevo ente llegó para generar normas que los diferentes países debían respetar y así poder regular la emisión de los Gases de Efecto Invernadero, el principal agente tras el calentamiento global. Así es como nacieron las Conferencias de las Partes o COP, por sus siglas en inglés (Conference of the Parties), y que constituyen la máxima autoridad de la mencionada convención en lo que se refiere a la toma de decisiones. Se decidió que una vez por año, en diferentes ciudades alrededor del mundo, los países de la ONU se reunirían a discutir el plan para atacar los efectos del cambio del clima. Una cita con muy buenas intenciones, pero que ad portas de su edición número 25 en Santiago, aun sigue sin lograr el gran acuerdo global que alguna vez se trazó como objetivo.

ACUERDOS Y TENSIÓN

La primera COP se realizó en Berlín en 1995, un año después de haber entrado en vigencia este nuevo protocolo, y desde allí se han sucedido 23 versiones, cada una con diferentes importancias dentro del relato de la discusión medioambiental. Por supuesto, las tres primeras marcaron precedentes: la COP 1 publicó el primer catálogo de compromisos, en la segunda se establecieron fechas específicas para crear estas reducciones (2005, 2010 y 2020) y la COP 3, realizada en Kioto en 1997 esbozó el primer gran acuerdo que estableció metas de reducciones de emisiones de gases contaminantes y del cual se discutió en las siguientes nueve ediciones.

El Protocolo de Kioto, como fue bautizado, impuso metas vinculantes para las emisiones de gases contaminantes, poniendo especial énfasis en las naciones más desarrolladas. Sus medidas debían entrar en vigencia el 2008 para que el 2012 y viéramos los primeros resultados. Sin embargo, las medidas no contaron con el apoyo de los dos países más contaminantes: Estados Unidos y China. Ese hecho determinó que, en 2007, durante la COP 13 en Bah, se decidiera que en la COP 15, con sede en Dinamarca, se reformularía el acuerdo. Pero en esa versión, India, Brasil y Sudáfrica se sumaron a China y Estados Unidos en su negativa. Los acuerdos no eran exitosos. Con el Protocolo de Kioto ahora pendiendo de un hilo, en 2011 se decidió renovar el acuerdo y prorrogarlo hasta el 2020. Pero en el fondo el sentimiento de estar cuesta arriba se sentía en el aire.

LA LUZ DE PARÍS

Un nuevo intento llegaría el año 2015 para la COP21, realizada en París. El evento de la capital francesa reunió lo discutido en las cumbres de Varsovia y Lima, para llegar a una propuesta que tenía una meta clara: limitar el aumento de la temperatura mundial en 2° Celsius. Esto, porque según estudios de la ONU, la Marra va rumbo a tener temperaturas de hasta 3,6 grados Celsius más que en la era preindustrial. Yen el peor de los casos, como estimó en algún momento el Banco Mundial, para el 2100 el aumento sería superior a los 7 grados, lo que tendría efectos catastróficos alrededor del mundo. El acuerdo siguió perfeccionándose y acumulando firmas y compromisos.

Un año después de presentarse, por ejemplo, casi 100 gobiernos ya habían ratificado las medidas, por lo que parecía ser que la historia de Kioto no volvería a repetirse. Sin embargo, la llegada de una figura inesperada cambió todo: Donald Trump, el actual Presidente de Estados Unidos, anunció en 2017 que no sumarla a Estados Unidos dentro del acuerdo tomado en París, una decisión discutida y resistida en buena parte del planeta. Es en este momento de incertidumbre que llega la COP25 a Chile, una cumbre que podría ser clave para el éxito o fracaso de todo lo avanzado desde el evento realizado hace cuatro años en Francia.

Recuadro
-Según estudios de la ONU, la Tierra va rumbo a tener temperaturas de hasta 3,6 grados Celsius más que en la era preindustrial.

-El Protocolo de Kioto, como fue bautizado, impuso metas vinculantes para las emisiones de gases contaminantes, poniendo especial énfasis en las naciones más desarrolladas. Sus medidas debían entrar en vigencia el 2008 para que el 2012 ya viéramos los primeros resultados.
Pie de pagina
POR AREL CHRISTIANSEN-