Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2018-03-31
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   19
Sección:   ECONOMÍA
Centimetraje:   14x22

Pie de Imagen
Más de 20 personas trabajan actualmente con Isaías Sharon.
Las Últimas Noticias
Isaías Sharon renunció a su trabajo y hoy tiene una academia de motivadores
El cáncer lo impulsó a formar a mas de 5.000 expertos en coaching
"Siempre comento que el cáncer fue un examen para poner a prueba aquellas cosas que había aprendido y otras tantas que había predicado", cuenta Isaías Sharon, 32 años, sicólogo de formación, y que producto de la enfermedad que estaba en fase 4, renunció a su trabajo de consultoría en empresas y reorientó su rumbo.

Así es que dio vida a Smart Coach, una academia donde ha formado a más de 5.000 personas en más de seis países en menos de cuatro años,. Todo, bajo un modelo de coaching integrativo que, con una metodología replicable y medible, se especializan en ayudar a que otros cumplan sus metas y desarrollen sus habilidades.

"Con el cáncer linfático pensé que no podía seguir gastando mi vida en algo que no me hacía sentido y el coaching sí me resonaba internamente, por eso decidí dejar el trabajo que tenía en consultorías. En mi tercera quimioterapia comencé a pensar lo que sería Smart Coach y cómo me dedicaría en este 'segundo tiempo' a formar a nuevos coaches", cuenta.

Hoy, gracias a la academia, forma y certifica a personas en Perú, Colombia, Bolivia y México, recalcando que es la entidad que más profesionales certifica en coaching cada año en Chile. "Hoy somos una empresa de varios millones de dólares y un equipo de más de 20 personas", afirma.

La meta para este año es crecer en el extranjero: "El objetivo es estar al 2020 en 20 países y aumentar nuestra presencia en el mundo corporativo", dice.

"Escondí dónde vivía"

"Por muchos años escondí donde vivía, porque ya me habían discriminado solo por la dirección. Esas situaciones son fuertes, pero también fue una oportunidad de muchas cosas, como de aprender de diferentes realidades. Yo me siento a cenar con grandes empresarios y autoridades a compartir o realizar sesiones de coaching, y también sé moverme en la periferia", cuenta Sharon respecto a su infancia en La Pintana y las dificultades que tuvo para surgir.

"Falta aceptarnos en lo que realmente valemos, dar a conocer nuestras ideas, eso nos hace grandes y valiosos", afirma.
Pie de pagina
FRANCISCA ORELLANA -