Más pasajeros para las líneas aéreas tradicionales y un aumento del porcentaje de mercado de las firmas low cost y ultra low cost, es el escenario que podría configurarse en el país, siguiendo los parámetros de lo que está pasando en la aeronáutica mundial. Así responde Estuardo Ortiz, CEO de JetsMART, a la consulta de lo que prevé para esta industria luego de la aparición y fortalecimiento de las líneas aéreas de bajo y ultra bajo costo.

"Lo que pasa es que se genera un mercado que no existía", afirma el guatemalteco, cabeza deJetSMART, firma de ultra low cost con 11,8% del mercado local, que festeja por estos días haber transportado un millón de pasajeros en menos de 10 meses de operación en el país, bajando los precios en 35%.

El ejecutivo detalló que parte de los objetivos de futuro de la firma son abrir nuevas rutas interregionales y realizar las gestiones necesarias para la apertura y futura operación de al menos seis aeropuertos en el país, con Viña del Mar y Pucón a la cabeza de ese proyecto.

En enero de 2019, la flota de cinco naves de la aerolínea pasará a tener 11 aviones, luego de que comience a llegar al país parte de la flota que adquirió índigo Partners -el fondo de inversión que controla esta empresa- de 430 unidades del modelo A320 que compró a Airbus por US$ 49.500 millones, lote que será alquilado a la firma chilena,además de Frontier Airlines (EE.UU), Volaris (México) y Wizz Air (Hungría). La inversión de las nuevas unidades asciende a US$ 775 millones, de un total de 76 aeronaves que solicitaron en 2017 y que comenzarán a llegar para esta empresa.

-¿Cómo es que su empresa logra transportar un millón de pasajeros en menos de un año?

-El proyecto desde un principio identificó a Chile como un país donde desarrollar una primera fase del proyecto. Chile sigue teniendo características que permiten apreciar un mercado de gente que no vuela en avión.

Porque ves un tema de precios; cuando comparamos el mercado doméstico de Chile con la región, en un porcentaje importante mantenía tarifas más altas que las que vas a observar en Perú o Colombia. También hay una clase media muy grande con poder adquisitivo real, con ingreso por hogar que está por $1 millón o $ 1 millón 200 mil, para quienes un precio de ticket dentro de Chile de $100 mil por tramo, en una familia de cinco personas, se volvía simple y sencillamente imposible. Esa gente optaba por auto o bus. JetSMART llega a decir que esa gran masa de gente, que en otros países vuela y viaja en avión, puede hacerlo también en Chile.

-¿De qué otra forma han impactado al mercado aéreo en Chile?

-Esa dinámica de mercado ha venido cambiando. Y tienes también el viajero de negocios. Probablemente para el mercado de negocios premium nuestra venida no es tan impactante, pero el emprendedor que necesita ir a ver a sus clientes al sur y que tal vez los iba a ver cada tres meses, ahora puede ir cada mes.

-¿Le sorprende que esto no lo haya visto nadie antes?

-La verdad es que sí llama la atención. Si ves la presencia de lowcost tan baja en Sudamérica, daro que llama la atención. Si ves a nivel mundial, más de un tercio del tráfico hoy ya es lowcost. Y lo más importante es que el cien por ciento del crecimiento mundial es lowcost.

EN LAS REGIONES

-¿De qué forma este modelo de aviación comercial está impactando a las regiones?

-La semana pasada lanzamos Antofagasta Anca, lo que antes se hacía a través de Antofagasta-Santiago con conexión, si tenías suerte, después de tres horas, paya tomar otro avión a mica. O podrías decidir por el bus, que en tiempo era aún más que volar en avión. Se daba el mismo sinsentido de que el pasajero debía pagar tasas de embarque en Santiago en la ida y el regreso. Una ruta como la que lanzamos la semana pasada te da un servicio non stop a Arica, La Serena, Concepción y La Serena. Y evidentemente a Santiago. Eso, a las distintas regiones, les cambia la percepción. Concepción es la segunda ciudad más importante en términos de población. Y sólo tenía la ruta a Santiago. En Europa hay ciudades de 100 mil habitantes con servicio a múltiples ciudades .

-¿Qué le parece Viña del Mar como destino de operación aérea?

-La Región de Valparaíso tiene todas las características, así como las tenía en su momento Antofagasta, Calma, Concepción o La Serena, que tienen hasta cinco vuelos. Valparaíso y Viña del Mar, operados a través del aeropuerto Torquemada de Concón, no solo ofrece a un millón de personas la oportunidad de volar non stop a diversos destinos nacionales, sino que a otros destinos internacionales. Ese es un tema que a nivel regional tenemos que impulsar. Por qué no tener más vuelos internacionales desde ciudades como Concepción, Puerto Montt, Calama, Antofagasta o Arica. El tema de Viña del Mar pasa simplemente porque exista, por parte del Estado, una autorización para operar en esa misma pista y aeródromo.

-¿Le parece suficiente la infraestructura existente?

-Para empezar es suficiente. En cuanto a la terminal, muchas operaciones low cost tienen una carpa, ni siquiera una construcción. Las personas saben y entienden eso. Para el próximo verano sería ideal hacer la prueba. Yo estoy dispuesto a que operemos Viña del Mar todo el primer trimestre de 2019. Y veamos si hay mercado.

-¿Podría combinarse esa operación con la apertura de rutas desde ciudades argentinas?

-Sin duda. Creo que Viña del Mar tiene las características de posicionarse como un eje turístico de Chile. Y no solo para servir a los habitantes de la Región de Valparaíso, que ya es suficiente razón para hacerlo. Tiene la capacidad de convertirse en un eje turístico del país. Ya el país tiene tremendos atractivos. Viña del Mar es muy atractiva para muchos sudamericanos y también fuera de la región sudamericana. La oportunidad está. La aerolínea está dispuesta. Lo único que falta es que el Ministerio de Obras Públicas y un esfuerzo coordinado entre la Armada y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) permitan que empecemos con vuelos domésticos, para que la operación no incluya aduana. Una vez que empiece a operar vamos a saber el potencial de mercado que existe.

-¿La aerolínea tiene interés en otras ciudades?

-El mismo caso quiero poner para aeropuertos que quisiéramos operar tan pronto como se nos deje: Pucón, Puerto Natales, Chillán, Los Angeles y Chiloé. Todos con un potencial turístico de talla mundial. Como extranjero me encanta Chile, me parece un país precioso, pero extremadamente modesto en sus ambiciones turística.

-¿Cree que la ambición no se condice con el potencial del país?

-Creo que el potencial claramente es mucho mayor. Y la aviación tiene un rol muy importante. En general, los países buscan desesperadamente líneas aéreas que crean en su proyecto de país. Aquí estamos un poco al revés: la línea aérea pidiéndole al país que crea en su proyecto. Ese es un terna clave.

LA INDUSTRIA

-¿Cómo cree que se va a comportar el mercado aeronáutico tradicional y el low cost y ultra
low cost?

-Creo que va a pasar lo que ha pasado en otros países: que existe un nicho para la aviación tradicional full service y otro para la aviación moderna low cost y ultra low cost. La dinámica que se ha repetido en esos ejemplos es que las líneas fullservice terminan llevando incluso más pasajeros de los que llevaban antes. Lo que pasa es que se genera un mercado que no existía. En Estados Unidos tienes los servicios de full service, que en el agregado terminan siendo la mayoría del tráfico, pero la línea aérea más grande en el mercado doméstico de ese país es Southwest. Vas a Europa y Ryanair, Wizz Air e EasyJet siguen creciendo, pero siguen operando Air France, British Airways y otras. El segmento tradicional va a llevar más pasajeros que antes, pero se va a crear una industria completamente nueva.