Desde que le diagnosticaron cáncer, hace dos años, Javiera Suárez ha mostrado algunas cualidades sobresalientes: una tremenda fortaleza para enfrentar la enfermedad y una inagotable alegría pese al complejo escenario. Aparte de eso nunca perdió la fe y siempre fue muy clara a la hora de hablar de su enfermedad.

Quizás es por esa misma honestidad que ha mantenido siempre que el último mensaje que escribió anoche, en su cuenta de Instagram, impacta más. Bajo el título "Lo que no te mata, te hace más real", Javiera contó que tras su operación del miércoles, en la Clínica Alemana, su recuperación "ha sido buena.

Sin embargo se nos complicó el escenario y es por eso que les agradezco los cientos de rezos, cariños y buenas energías. Los necesito para que el nuevo tratamiento que estoy usando me haga efecto rápidamente. Necesito un milagro para sanarme y eso sólo puedo conseguirlo junto a ustedes. Tal como hace 1 año y 5 meses nació Pedrito, en gran parte por el cariño y oraciones de ustedes, hoy les pido que me ayuden a sanar y poder vivir muchos años más. Así sea. Dios los bendiga".

En tres horas el mensaje, que acompañaba una foto sonriente de Javiera, sumó 80 mil Me Gusta y casi 10 mil mensajes, todos de apoyo. Algo parecido a lo que está haciendo José Miguel Viñuela, quien le está armando un cuaderno con mensajes positivos.

"La iniciativa es de Raimundo Encina, un amigo en común que tenemos. A él se le ocurrió porque esas cosas la llenan de energía, y lo propuso en el grupo de WhatsApp de los amigos. Todos lo apañamos. Creo que la Javi lo que más necesita en estos momentos es llenarse de buenas vibras". -Subió una foto a su Instagram donde aparece con Javiera.

-Me la tomé el domingo en la clínica con la Javiera.

Fue antes de su operación. Le habían drenado su pulmón el sábado para sacarle como tres litros de líquido que tenía y cuando llegué ya estaba sentada en su pieza, de piernas cruzadas y conversando muy animada. No me deja de impactar su energía y fortaleza.

-¿Siempre la ve con el mismo optimismo?

-Jamás la he visto deprimida y eso es tan importante cuando tienes una enfermedad así. En el verano estuvimos conversando y me contó que se sentía súper bien y que iba a empezar a ir al gimnasio. Y de repente viene este bajón y tú piensas que cualquiera se podría desanimar, pero la Javi es súper fuerte y entiende que el cáncer es una enfermedad que siempre está presente y ha aprendido a vivir con eso.