as dos grandes iniciativas de transporte que existen en la actualidad para la IV y V región, están relacionadas a proyectos de mejoramiento del sistema del transporte público que apoyan el desarrollo regional con un impacto directo en más de 1.3 millones de habitantes. Si bien el propio presidente Sebastián Piñera ha dado su apoyo para que ambas ideas se lleven a cabo, hemos podido ver un retraso en planes que deben tenerse como prioridad, los que además significan una inversión estimada de más de US$1,700 millones.

El mejoramiento del transporte público en Coquimbo y La Serena es fundamental, principalmente, por el colapso de las rutas que recorren de norte a sur en horas punta. El tranvía, en conjunto con la habilitación de Av. El Santo, mejorará considerablemente la conectividad.

La prioridad de esta opción se debe a que la conurbación Coquimbo–La Serena es de las zonas con mayor crecimiento poblacional y de parque automotriz, con una estimación de crecimiento demográfico al 2020 que superará los 500 mil habitantes. Por su parte, el proyecto del tren rápido a Valparaíso, junto al ensanche de la Ruta 68, influirá de manera importante en la descongestión de dicha carretera. Asimismo, otras localidades se verán favorecidas, como Casablanca con la estación intermediaria, fomentando el turismo y una mejora en servicios, sin mencionar el innegable aporte a los ciudadanos que viajan entre la capital y el puerto.

Es de esperar que se destraben estos proyectos en virtud de la conectividad de algunas de las zonas más importante del país. Pedimos celeridad y voluntad política en sacar adelante ambas iniciativas.