'Vender usado tu teléfono Huawei va a ser cada vez más difícil. ¿Quién querría comprar un teléfono del que no sabes qué va a pasar en los próximos meses?', dice Hugo Durney, director del Centro de Vinculación y Transferencia Tecnológica de la UTM. Esa es solo una de las consecuencias que significarán para los usuarios las sanciones de EE.UU. a la firma tecnológica china y que llevó a Google a informar que dejará de hacer negocios 'que requieran transferencia de hardware, software y servicios técnicos' con la empresa. Esto significa que Google ya no proveerá de actualizaciones de su sistema operativo Android, utilizado por todos los teléfonos de Huawei, ni tampoco de servicios propios, como mapas o respaldo de datos en la nube.

Si bien el Departamento de Comercio de Estados Unidos aplazó en tres meses las restricciones a la firma china, la incertidumbre de los propietarios de un teléfono de dicha compañía fue inmediata. Para relajar los ánimos, quienes tengan actualmente un teléfono Huawei no verán ningún cambio ni restricción en el funcionamiento de su teléfono. Todo seguirá tal cual, por lo menos en los siguientes tres meses. De entrar en vigencia las restricciones de Google, lo primero que podría verse afectado es la seguridad. 'Google dejará de proveer actualizaciones. El usuario no se da cuenta de ellas, porque se instalan automáticamente, pero estas son importantes porque resuelven vulnerabilidades y solucionan problemas', dice Durney. Huawei aseguró ayer a través de un comunicado que continuará brindando actualizaciones de seguridad y servicio posventa a todos los teléfonos vendidos o que estén en stock para su comercialización. Sin embargo, no detalló cómo lo harán.

'Hasta que Huawei no diga exactamente qué va a hacer, estamos ante una situación de alta indeterminación para los usuarios', dijo Eusebio Nieva, director técnico de Check Point para España y Portugal, a EFE. 'Los ciberdelincuentes suelen aprovechar tanto las aplicaciones como las vulnerabilidades del sistema operativo para atacar a los usuarios', de ahí la necesidad de ir descargando las nuevas versiones, agrega Nieva. Google aseguró que los teléfonos Huawei ya existentes seguirán teniendo acceso a Google Play, su tienda de aplicaciones, y a Google Play Protect, un escaneo de seguridad para las apps. Esto, en esencia, garantiza que los dueños de aparatos de la firma china no tendrán inconvenientes para descargar aplicaciones.

Las dificultades podrían darse a futuro. Si las sanciones finalmente se ponen en práctica, los próximos teléfonos de la firma no podrán llevar la última versión de Android. Con esto también se restringe el acceso a servicios de Google cruciales para los usuarios como YouTube, Google Assistant, Gmail, Mapas, respaldo de contactos y fotos, entre muchos otros. Sin embargo, según algunas informaciones, Huawei llevaría algunos años trabajando en su propio sistema operativo, Kirin OS. En China, donde los servicios de Google están prohibidos, Huawei utiliza una versión basada en Android AOSP, el sistema operativo de código abierto, que no incluye las aplicaciones ni servicios de la tecnológica estadounidense. Un nuevo sistema operativo chino tendría el principal inconveniente de no contar con la tienda de aplicaciones de Google, por lo que la compañía debería crear una propia o usar tiendas ya existentes, como F-Droid. 'Eso no se puede hacer de un día para otro. Huawei tendrá que crear también servicios que reemplacen a los de Google para que sus clientes no se sientan en desventaja', dice D