"El diagnóstico era lapidario. Mi cáncer hacía metástasis hacia los huesos y sólo quedaba por delante la extremaunción, sin embargo acá estamos': Risueño como siempre, Jorge "Chino" Navarrete, no se da el tiempo para lamentaciones y prefiere hablar más de los proyectos futuros que de todo lo vivido.

Sin querer evitar los tres años transcurridos entre el dictamen de cáncer prostarico, el comediante que fuera uno de los platos fuertes de la televisión en los 90, hoy se aproxima al alta con ganas de dejar en claro su vigencia. Entremedio se separó de la mujer con quien compartió casi 40 años y vio morir a su mascota. "Quizás lo más difícil en todo este tiempo", fue la reflexión inmediata, pero no había mucho espacio para lamentaciones.

— ¿Cómo abordó ese diagnóstico inicial?
La verdad es que no me tomé mucho tiempo en querer a la enfermedad. Suena raro, porque el vaticinio de los médicos no era el mejor, pero entendí que sólo abrazando la enfermedad iba a salir adelante,

—¿Y de dónde salió esa convicción?
De la psicología. En 2012 me titulé y la coincidencia de mi enfermedad con mis estudios, no son una casualidad. La vida me regaló la chance de enfrentar esto con otras herramientas.

—Una profesión que parece lejana a su carrera en el humor. Pero yo ya había estar liado algo relacionado, como fue la filosofia hasta el año 73. En 2006 fui a matricular ami hija y mientras lo hacía, me enteré que la ley Valech me podía beneficiar. En menos de una semana junté los papeles y empecé este camino.

—¿Un camino que lo aleja definitivamente de la televisión?
Me pasó que no me gusta mucho lo que se ve hoy en pantalla. No comprendo el humor como una competencia y no me gusta el formato de desafiamos a hacer reír. La tevé debe aprovechar lo positivo del humor.

¿Eso significa dejar los escenarios?

Por ningún motivo. Me ha pasado que mucha gente cree que me estoy muriendo y cuando me ven o hablan conmigo, se dan cuenta que estoy mejor que nunca. Todo lo que viví por el cáncer estará plasmado en mi próximo show, donde espero compartir esto con humor y una importante reflexión.

—¿Y con algún escenario como objetivo? Ojalá que en todos los posibles. En abril me tengo que hacer los chequeos que podrían dar por superado totalmente este proceso y ahí es momento de pensar en ese show. Tengo agendadas unas charlas en Foz de Iguazú y muchos proyectos, porque me queda cuerda para rato.