Un día después del atentado con bomba ocurrido contra un recinto de la policía uniformada de Huechuraba, el mandatario Sebastián Piñera, hizo un llamado al Senado a aprobar la denominada ley corta antiterrorista sobre técnicas intrusivas para permitir el éxito de la fase indagatoria y concluir con sentencias condenatorias de los responsables de actos terroristas.

'Quiero aprovechar de convocar a todos mis compatriotas: en esta guerra tenemos que estar todos unidos, porque la única forma de derrotar al terrorismo, al narcotráfico y a la delincuencia es con una unidad férrea de toda la ciudadanía. Llegó el momento en que el Congreso, y particularmente el Senado, apruebe el proyecto de ley antiterrorista que enviamos hace meses al Congreso', dijo Piñera.

El gobernante visitó la comisaría en compañía del ministro del Interior, Andrés Chadwick, quien emplazó a la 'unidad de la ciudadanía', porque 'esto no es para la pequeña política, estos son hechos que remecen al país y que ponen en juego la seguridad de todos nosotros, tienen que ser enfrentados con una altura de mira, con un sentido de país'.

La ley corta surge de la separación del proyecto principal que busca sustituir la legislación vigente en materia de sanción del terrorismo. Esa propuesta, originalmente fue presentada por la entonces Presidenta Michelle Bachelet, en 2014; posteriormente se fusionó con una moción similar de senadores de Chile Vamos, para luego incluir una indicación sustitutiva por el actual gobierno en abril pasado, dejando en un texto lo concerniente a la reestructuración de los delitos base, estableciendo conductas objetivas de perpetración de delito terrorista.

A ese llamado, la oposición respondió de manera parcial. El senador DC Francisco Huenchumilla dijo que la propuesta 'no soluciona nada y es simplemente una medida comunicacional del
Gobierno', por lo que votó en contra recientemente en la comisión de Constitución. De igual manera la rechazó Alfonso de Urresti (PS); mientras que la respaldó Felipe Harboe (PPD), Víctor Pérez (UDI) y Andrés Allamand (RN).

Al profundizar sus razones, Huenchumilla añadió que 'yo estoy en contra de esa ley porque no soluciona nada. El proyecto de fondo está durmiendo el sueño de los justos, porque el Gobierno lo tiene abandonado. El Gobierno tiene que decirle la verdad a la gente: no vamos a combatir el terrorismo con esa modificación, porque es una ley para usarla en un juicio cuando el hecho terrorista se ha producido'.

Mientras que para el presidente de la comisión de Constitución del Senado, Felipe Harboe (PPD), la 'ley corta antiterrorista aportará técnicas de investigación para ayudar en la persecución de terroristas, pero el éxito de las investigaciones seguirá dependiendo de la capacidad de la inteligencia policial. El Presidente Piñera mezcla terrorismo, narcotráfico y delincuencia, tres fenómenos con orígenes, estrategias y técnicas investigativas completamente distintas, para revertir su baja aprobación en seguridad'.

Desde la DC, además, su presidente Fuad Chahin, planteó que 'nuestra disposición es para poder hacer un debate en serio respecto de, además, un proyecto que ya está en el Congreso, que el propio gobierno actual presentó la indicación, avancemos sobre eso, y no sigamos simplemente parchando parcialmente una norma que claramente no está resolviendo el problema de amenaza terrorista'.

En Chile Vamos, el senador Allamand explicó que la 'ley corta incorpora al combate antiterrorista medidas especiales de investigación —agentes encubiertos, reveladores, entregas vigiladas e informantes— que ya están presentes para perseguir otros delitos como el narcotráfico. Es absurdo que no estén disponibles para la acción legal antiterrorista'.

Al rebatir a la DC, Allamand dijo que la 'ley antiterrorista no solo se aplica sobre actos consumados, sino que expresamente permite hacerlo contra acciones calificables como conspiración y concierto previo para delinquir, por lo que son efectivos instrumentos de prevención'.