Pais:   Chile
Región:   O'Higgins
Fecha:   2018-02-04
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   4
Sección:   Editorial
Centimetraje:   17x8
El Rancaguino_Rancagua
CARTA AL DIRECTOR
Hoy día el cáncer es un problema de interés público. Cada año aumenta la tasa de mortalidad en nuestro país y aún no contamos con una política de cáncer que se haga cargo de manera integral. En las recientes actuaciones del Ministerio de Salud, no sólo se nota la ausencia de una mirada futura, sino también confusión sobre la forma en que se enfrenta este problema. Específicamente en el 3er decreto de la ley Rica de Soto no vemos criterios objetivos (ni médicos ni económicos) para decidir excluir o no priorizar patologías con aumento y mayor incidencia en cáncer, como lo son Cáncer de mama, gástrico, próstata, entre otros. Muchos pacientes y organizaciones sentimos un trato inequitativo y arbitrario del Estado en la cobertura de estas patologías. Tenemos listas de espera y las respuestas de la autoridad es apelar a la beneficencia para cubrir el costo del tratamiento. Lo más inaceptable: las variables socioeconómicas y étnicas tienen un impacto devastador en la incidencia y mortalidad del cáncer. Insistimos en la necesidad de marcar precedentes, no cortoplacistas y paliativos. Abordar la distribución ineficiente de los recursos del control del cáncer: fragmentación en los sistemas de salud, desigualdad en las prestaciones basada en el poder adquisitivo y diferencias geográficas en los servicios. Según informe The Economist, más de 1 millón de personas desarrollaron la enfermedad en América Central y del Sur, y fallecieron 550 000 personas. En Chile Los tumores malignos son la segunda causa de muerte, con 24.592 fallecidos en 2013 (25,6% del total de muertes) y una tasa de 139 por 100.000 habitantes.

Hoy urge una solución concreta y equitativa para quienes vivimos día a día con estas patologías.
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-Nancy Sarpi Pacheco Presidenta Fundación Vi-Da