Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2020-07-07
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   B2
Sección:   Economía y Negocios
Centimetraje:   31x27

Pie de Imagen
Los agricultores señalaron que las lluvias beneficiarán a todas las especies, pero que zonas como Petorca —donde hay grandes cultivos de paltas— se verán especialmente favorecidas por el importante déficit hídrico que arrastraban.
El Mercurio
Agricultores coincidieron en que las recientes precipitaciones dan mayor tranquilidad para la campaña 2020-2021:
Próxima temporada podría ser la mejor de los últimos tres años si continúan lluvias en julio
Desde el sector agrícola pronostican que la mayor disponibilidad de agua favorecerá las futuras cosechas. Sin embargo, advierten que esto no significa que se haya revertido el déficit hídrico en el país.
Luego de un 2019 marcado por la sequía, los agricultores celebraron las lluvias que cayeron a lo largo del país el fin de semana.

El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, Ricardo Ariztía, dijo que este escenario permite tener una visión más optimista respecto de la próxima temporada. 'Los registros de importantes aumentos de acumulación de nieve debieran dar una mayor seguridad de riego para la siguiente campaña', señaló. Un análisis similar hizo el presidente de Gesex, Cristián Allendes, quien dijo que el agua caída ayuda a tener una 'cierta normalidad'. 'Esto nos tiene bastante optimistas; si julio es seminormal en términos de lluvia, ya podríamos enfrentar una temporada de riego mejor que en los últimos tres años', señaló.

Allendes agregó que en la campaña pasada el tamaño de las frutas se vio afectado por la falta de agua, lo que repercutió en precios más bajos. Un aspecto que debiese mejorar para la temporada 2020-2021. En esta misma línea, el gerente de producción de Dole Chile, Juan Carlos Valenzuela, dijo que las precipitaciones eran 'fortificantes' para la industria. 'En 2019 hubo problemas de calibre en manzanos, kiwis y carozos. El hecho de tener el recurso hídrico para poder regar esta temporada nos asegura que esto se pueda revertir', sostuvo. Mientras que Sebastián Warnier, gerente agrícola de la mayor exportadora de cerezas del país, Garces Fruit, destacó que otro fenómeno positivo fue la acumulación de nieve en la cordillera. 'Esto genera una gran reserva de agua, muy importante para tener disponibilidad hídrica en los cauces naturales y asegurar el riego de primavera verano', afirmó.

'Es tan profunda la crisis que esta agua calma un poco la ansiedad', afirmó el presidente de la Federación de Productores de Fruta, Jorge Valenzuela. Todas las especies debiesen verse favorecidas por las lluvias, dijo Valenzuela, pero zonas como Petorca se ven especialmente beneficiadas por la difícil situación hídrica que atraviesan. El gerente agrícola de Viñedos Veramonte, José Aguirre, dijo que las precipitaciones ayudarán a tener un año relativamente normal en cuanto a producción y calidad. 'Se viene una vendimia normal si es que se mantienen las condiciones, pero que será mucho mejor que la del 2020 en términos hídricos', aseguró.

Una crisis estructural

Pese a todo, desde el sector coinciden en que las lluvias caídas no revierten la crisis hídrica en el país. Según información de la Dirección Meteorológica de Chile, en la estación de Quinta Normal, Región Metropolitana, a la fecha han caído 160 milímetros (mm) de agua versus los 53 mm que se registraron en la misma fecha de 2019.

Sin embargo, en un período normal el agua caída debiese rondar los 176 mm, lo que implica que todavía hay un déficit de 9,3%. Lo mismo para la Región del Maule: a la fecha la estación General Freire en Curicó lleva 323 mm, un 8,9% más bajo que lo registrado en un período normal. Ricardo Ariztía dijo que si bien las precipitaciones ayudan, no revierten el complejo panorama. 'La clave es invertir en infraestructura hídrica y lograr una mejor gestión del agua', explicó.

Un punto que también expuso Jorge Valenzuela, quien señaló que la escasez hídrica en Chile se trata de una crisis estructural que va más allá de los niveles de agua caída en un año. 'Como país no nos podemos plantear ser una potencia agroalimentaria si somos lluviodependientes', declaró. Por su parte, el gerente agrícola de Aresti Chile Wine, Marcelo Lorca, manifestó que es difícil predecir lo que pasará este invierno en términos hídricos. 'Los pronósticos son algo negativos para el resto de invierno. Hay mucho que esperar del aporte hídrico de los meses que se vienen', afirmó.

Recuadro
"Las lluvias que cayeron son buenas, pero como país no nos podemos plantear ser una potencia agroalimentaria si somos lluviodependientes'.

Jorge Valenzuela Presidente de Fedefruta

"En 2019 hubo problemas de calibre en manzanos, kiwis y carozos. El hecho de tener el recurso hídrico para poder regar esta temporada nos asegura que esto se pueda revertir'.

Juan Carlos Valenzuela Gerente de producción de Dole Chile

"Las precipitaciones ayudan a aminorar el impacto de la sequía, no revierten el complejo panorama. Por eso, la clave es invertir en infraestructura hídrica'.

Ricardo Ariztía Presidente de la SNA

"Esto nos tiene bastante optimistas; si julio es seminormal en términos de lluvia, ya podríamos enfrentar una temporada de riego mejor que en los últimos tres años'.

Cristián Allendes Presidente de Gesex

"Esto genera una gran reserva de agua, muy importante para tener disponibilidad hídrica en los cauces naturales y asegurar el riego de primavera verano'.

Sebastián Warnier Gerente agrícola de Garces Fruit

"Se viene una vendimia normal si es que se mantienen las condiciones, pero que será mucho mejor que la del 2020 en términos hídricos'.

José Aguirre Gerente agrícola de Viñedos Veramonte

"Los pronósticos son algo negativos para el resto de invierno. Hay mucho que esperar del aporte hídrico de los meses que se vienen'.

Marcelo Lorca Gerente agrícola de Aresti Chile Wine


Tamaño Los productores esperan que en la próxima temporada la fruta tenga un mejor calibre.
Pie de pagina
Carolina Undurraga B. -