Las empresas que pasen por alto la necesidad de armarse de un ambiente de alta disponibilidad podrían estar poniendo en riesgo no solo el éxito de su estrategia de digitalización sino también la permanencia del negocio.

Un informe titulado "Estudio de 2016 sobre las causas de las caídas de los centros de datos", de Ponemon Institute, evidencia que el costo promedio de una caída del centro de datos cuesta US$ 8.851 por minuto.

A su vez, los resultados del "Reporte de Disponibilidad 2017", elaborado por Veeam, indican que el 84% de las compañías a nivel global no confía al 100% en las capacidades actuales de disponibilidad con que cuentan.

El texto destaca que si bien siete de cada 10 organizaciones a nivel mundial consideran que la disponibilidad de datos y aplicaciones es crítica o muy importante para la ejecución de sus iniciativas de transformación digital, en el 66% de los casos tales iniciativas aún se están viendo inhibidas por una disponibilidad insuficiente o bien a causa de tiempos de inactividad no planificados.

Lo anterior es de suma relevancia si tomamos en cuenta que, según estimaciones de IDC, hacia el año 2021 al menos el 40% del PIB de América Latina estará "digitalizado", con un crecimiento de las diversas industrias impulsado por ofertas, operaciones y relaciones mejoradas digitalmente.

Juan Pablo Rozas, CEO en Patagonia IT y consultor en proyectos de innovación, considera que para transformar las organizaciones es necesario rediseñar no solo los productos y servicios, sino también los modelos de negocio y los procesos.

"Tenemos que cambiar la cultura de nuestra organización para implantar un mindset digital. ¿Quiénes deberían liderar la transformación digital? Mi respuesta siempre es que todos los miembros de la empresa, pues se necesita impulsar la cultura de la innovación dentro de la organización y mejorar la colaboración interna para generar nuevas fuentes de ingresos, ser capaces de responder rápido ante las necesidades del mercado y crear una ventaja competitiva para la organización", apunta.

Rozas explica que la tecnología actúa claramente como habilitadora de la transformación digital, ayudando a las empresas a ser más ágiles, receptivas y capaces de evaluar y aprender.

Invertir en la tecnología adecuada

Diversos estudios demuestran que existe una relación directa entre el funcionamiento de los centros de datos y el rendimiento financiero de una empresa: si las instalaciones críticas se caen las empresas no pueden realizar las operaciones más básicas para las que fueron creadas, esto se traduce en pérdidas de ganancias y de clientes.

No obstante, solo el 28% de empresas ha invertido en tecnología adecuada que garantice su éxito a largo plazo. El informe Global Risk Landscape 2018, elaborado por BDO y basado en un estudio con información entregada por empresas de distintos tamaños en los cinco continentes, indican que aún siguen siendo pocas las compañías que tienen un modelo operacional y comercial sostenible, invirtiendo adecuadamente en tecnología e innovación para garantizar su éxito a largo plazo. Un 26% de los encuestados dice "estar en proceso" de implementar un modelo sostenible y de actualizar la capacidad tecnológica en consecuencia, mientras que otro 30% de las empresas dice estar en una etapa de desarrollo. El 16% restante apenas se encuentra en la etapa de planificación.

Independiente del grado de avance en nuevas tecnologías, todas asumen la relevancia de la innovación para el manejo y gestión del riesgo corporativo. Para esto es clave la alta dirección. De acuerdo al informe, el 91% de las empresas de alto rendimiento han elevado el tema de la innovación en la agenda de sus directorios.

"No se debe pretender que la junta de directores y/o inversionistas, entiendan todo lo que tiene que ver con la era digital. Sin embargo, deben poder entender lo suficiente como para poder desempeñar un papel eficiente en la toma de decisiones que involucran innovación tecnológica y el servicio de esta en la estrategia para la generación de valor y mitigación de los riesgos", explica Mauricio Magofke, Risk & Advisory Services IT manager de BDO Chile.

A consideración del experto, cuando se habla de innovación y era digital, ambos términos se deben entender con un enfoque centrado en el cliente y la agilidad.

El estudio refleja que, en todas las industrias, se percibe como beneficio clave la agilidad, pues genera una mayor satisfacción y retención del cliente (68%).

Confianza

En el entorno on-demand 24/7 en el que operan las empresas digitales, la capacidad de respuesta en tiempo real puede marcar la diferencia entre cumplir un pedido y habilitar una transacción, o presentar una barrera al cliente que lo aleje del negocio.

Fabio Abatepaulo, director de Transformación Digital de Unisys para América Latina, destaca que, además de afectar la operación o las ventas, lo que se puede medir financieramente, uno de los aspectos más impactantes que puede afectar la caída de un centro de datos es la imagen de la empresa frente sus clientes.

"La pérdida de confianza de los clientes en la estabilidad y fortaleza de una empresa afecta negocios futuros y lleva tiempo y dinero para ser recuperada siendo muy difícil de medirse. Dependiendo del tipo de servicio o producto que una empresa brinda a sus clientes, la no disponibilidad genera un impacto directo en los negocios de sus clientes", ", recalca.

Abatepaulo añade que, dependiendo del impacto, estos clientes pueden tomar la decisión de no volver a confiar aspectos importantes del negocio.