Desde la semana pasada, la Ley Ricarte Soto -que financia tratamientos de alto costo- incorporó la cobertura de terapias para cuatro nuevas enfermedades: angioedema hereditario, distonía generalizada, tumores neuroendocrinos pancreáticos e hipoacusia sensorioneural. Con ello, en total son 18 los males que están incluidos en la norma.

Y a ellos podrían sumarse en el corto plazo los medicamentos para otras dos enfermedades: artritis psoriásica y colitis ulcerosa.

La administración de Michelle Bachelet estudió su inclusión, pero no terminó de tramitar la modificación que buscaba añadir esas terapias a la ley. Ello, pese a que ya se habían hecho públicos qué fármacos se financiarían para esos males y solo faltaba la tramitación del decreto que lo oficializara.

Ahora, las agrupaciones de enfermos están pidiendo al Gobierno terminar la tramitación y ratificar el cambio. "Queremos que se firme pronto la resolución y los pacientes puedan acceder a sus tratamientos", dijo Cecilia Rodríguez, vocera de la Alianza de Pacientes.

La estimación del Ministerio de Salud es que con el cambio se beneficiarían 258 pacientes con colitis ulcerosa y 490 con artritis psoriásica en el primer año de inclusión en la Ley Ricarte Soto.