El comercio no volverá a estar de moda. Al menos no en el corto plazo, dicen los analistas que terminan de digerir la reciente oleada de reportes trimestrales y anuales con que las empresas cerraron 2018. Las débiles cifras que mostró el sector a fines de año, especialmente reflejado en lo que se conoce como ventas en tiendas iguales (SSS, por sus siglas en inglés), se complementa con un pesimista análisis para lo que viene: la falta de catalizadores para que esto se revierta en el corto plazo. Un ejemplo es Parque Arauco: según su reporte, las ventas de sus arrendatarios llevan seis trimestres con crecimiento negativo. En el cuarto trimestre de 2018 cayeron -2,7%, aunque el peor trimestre del año fue el tercero, con una caída de -4%. En tiendas por departamento, las SSS de Falabella cayeron -3,6% en 2018, una gran diferencia con el alza de 4,8% de 2017. El único trimestre positivo fue el segundo, cuando subieron 0,2%

'Las ventas en mismas tiendas se han visto afectadas de manera transversal en la industria del retail y en las tiendas por departamentos en Chile', dice Ana Carolina Santos, analista senior de Bci Corredor de Bolsa. 'Nuestras estimaciones no contemplan un cambio de tendencia en el corto plazo'. Coinciden en Credicorp Capital, quienes señalan que 'los sectores cíclicos (retail y bancos), muy importantes en el índice IPSA, no van a tener un año positivo, con el consumo rezagado y datos macro desfavorables para bancos'. Coincide LarrainVial, ya que asegura que hay luz al final del túnel para el sector, pero no durante este año.

'Anticipamos que el nivel aún alto de inventarios en el primer semestre de 2019 continuará ejerciendo una presión a la baja sobre los precios en el sector y, en consecuencia, sobre los resultados y las ventas comparables de las compañías bajo nuestra cobertura'. En Security subponderan al sector. 'En Chile, el reporte de resultados d e l cuarto trimestre del año pasado ha dado luces de un consumo aún más débil al anticipado, afectado además por bajo flujo de ventas a extranjeros'.

Varias causas, una tendencia

El director del Centro de Estudios del Retail de la U. de Chile, Marcel Goic, dice que el decrecimiento 'afectó mayormente a las tiendas por departamento, pues las cifras para supermercados parecen ser marginalmente positivas'. Cree, además, que es improbable mantener los crecimientos anteriores, dado el nivel de desarrollo de Chile.

'Esperaría que mientras en algunos otros países de la región tendrán tasas de crecimiento relativamente sostenidas en los próximos años, en Chile, el patrón a esperar es de cifras marginalmente negativas en períodos de bajo crecimiento económico y marginalmente positivas en años de bonanza', agrega. Según un reporte de Scotiabank, hay tres razones que explican la caída de las ventas en 2018: la disminución de la masa salarial y la confianza de los consumidores, la reducción del ticket promedio de ventas (lo cual atribuye, en parte, a los sistemas de delivery, que permiten escoger fácilmente el menor precio) y la disminución de las compras de los argentinos.

En este caso, su equipo de analistas es optimista: espera una recuperación del sector en la segunda mitad del año, junto a la mejora en el empleo, que vendría con mayores tasas de inversión. Carolina Ratto, quien encabeza el equipo de análisis de acciones de Credicorp Capital, señala que 'en términos generales, las caídas especialmente en tiendas por departamento obedece, en parte, al poco dinamismo en el consumo que impactó el tráfico, pero principalmente a una actividad promocional muy agresiva que impacta en el menor ticket promedio'. Con el sobrestock, llevó a las empresas a lanzar promociones para bajar sus inventarios, lo que afectó su margen bruto.

Algunas lo resistieron; ese el caso de Forus. Dicen en el mercado que hasta antes del cuarto trimestre privilegiaba el margen y no le importaba que el indicador de ventas en las mismas tiendas (SSS) estuviera bajo. Pero en su última entrega de resultados, producto de las promociones, el margen bruto en Chile disminuyó más de 200 puntos base y las SSS cayeron -3,3%. Esto sin contar la fuerte arremetida que ha presentado el comercio electrónico y que ha dado a los clientes más herramientas para discriminar por precio. Una tendencia que seguirá avanzando: 'Se debe tener en cuenta la incidencia creciente del e-commerce dentro de los ingresos por ventas de las compañías del sector, dado que al aislar el efecto por dicho crecimiento, los SSS de tiendas físicas presentarían un dinamismo aún menor', dice Santos, de Bci.