Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2020-01-26
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   B9
Sección:   Economía y Negocios
Centimetraje:   55x27

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-La matriz de VTR, Liberty Latinoamérica, se ha involucrado directamente en los conflictos.

-Vanessa Facuse lidera la demanda de AMC, junto a Jorge Bofill, ambos socios de Bofill Escobar Silva Abogados.
El Mercurio
Tiene conflictos con AMC y con otros cableoperadores para levantar restricciones
El camino cuesta arriba de VTR en 2020: frentes judiciales abiertos y una batalla por retener clientes que cada día cuesta más
Después de superar —y perder— la batalla con TVI, en las oficinas de la cableoperadora de capitales norteamericanos pensaron que las aguas se habían calmado y que ya no tendrían restricciones para comprar competidores y cambiar o sacar canales de la parrilla. Pero todo se complicó.
No fue un buen término de año para VTR, y tampoco ha sido un inicio de 2020 muy feliz. No por el estallido social, sino porque tiene a cuestas varios frentes legales abiertos que prometen tener a la multinacional en el ojo del huracán.

Fue el 1 de septiembre del año pasado cuando el gerente general de la compañía, Guillermo Ponce, anunciaba novedades: le pedirían al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) que levantara las ocho restricciones que le impusieron a la firma en 2004 —cuando se fusionaron con Metropolis Intercom—, y que no los deja, entre otros, comprarse empresas competidoras y eliminar canales de su parrilla sin una serie de justificaciones. ¿El argumento? Ya no tienen más del 80% del mercado de TV de pago, como en 2004, sino que ahora ostentan poco más del 30%, y seguido de cerca por sus competidores.

Pero además, VTR anunciaba el lanzamiento de un revolucionario VOD 2.0 (video on demand), que permitiría que la gente viera sus películas y programas favoritos cuando quisiera, y sumaría directamente a Netflix en su catálogo. Auguraban tenerlo operativo a fines de 2019, pero lo que ocurrió no hizo más que poner cuesta arriba estos dos objetivos de la firma controlada por Liberty Latinoamérica.

Es que una serie de litigios en el TDLC y hasta en el Tribunal Constitucional (TC) han complejizado el panorama.

La pelea de 'David contra Goliat'

El año pasado, un conflicto de alto impacto tuvo un desenlace, cuando TVI —firma vinculada a Luis Venegas y que agrupa a canales como Zona Latina y Via X—logró revertir un fallo del TDLC que en abril de 2018 le había dado la razón a VTR que los había sacado de su parrilla en 2016. Contra todo pronóstico, en mayo del año pasado la Corte Suprema le dio la razón a TVI y determinó que VTR había incurrido en un incumplimiento de la cláusula quinta de sus ocho condiciones, la que les prohíbe usar su poder de mercado sobre terceros programadores que vendan señales o producciones de TV pagada, para negar injustificadamente la compra, u ofrecer por ellas un precio que no tenga relación con las condiciones de competencia del mercado. Fue una pelea, como la catalogaron en TVI, entre David y Goliat, y tal como la historia bíblica, ganó David, en un conflicto que todavía puede abrir otro frente legal, si TVI va a tribunales a pedir una indemnización por el daño económico que sufrieron al estar fuera de las pantallas de VTR.

Lo cierto es que hubo molestia en los cuarteles generales de Liberty por haber perdido esta pelea, principalmente porque podía generar precedentes para futuras negociaciones. Y algo de eso fue justamente lo que pasó, porque mientras se debatía en tribunales la apelación de TVI, VTR le notificaba a sus clientes en octubre de 2018 que los canales de AMC Networks Latin America —AMC, El Gourmet, Film & Arts, Europa Europa y Sundance TV, entre otros— estarían en la parrilla solo hasta el 31 de diciembre de 2018.

Las razones que le dio VTR a AMC, en tensas negociaciones entre Santiago y Miami, era que el rating de sus canales había bajado, por lo que primero propuso bajar en 50% el precio que pagaba, y en una segunda tanda de negociaciones, llegó a ofrecer reducir en 70% el precio a sus canales, según la distribuidora. Y ahí fue cuando empezó el enfrentamiento.

Fue el 28 de agosto de 2019, días antes de que el TDLC hiciera público el ingreso de la consulta de VTR para eliminar sus restricciones, que Jorge Bofill y Vanessa Facuse demandaron a VTR por haber abusado de su posición al sacar a AMC de la parrilla. Además de pedirle reducir el precio, AMC acusa que VTR intentó aumentar la disponibilidad de contenidos on demand a 30 horas de manera permanente y sin un pago a cambio, versus las 20 horas que tenía originalmente.

La cableoperadora salió a defenderse, a través de la abogada Nicole Nehme. Dijo que no podía ser dominante frente a AMC Latam, argumentando el tamaño que tenía su matriz, que al 2018 tuvo ingresos por tres billones de dólares, de los cuales US$ 600 millones correspondían a su línea internacional y de los cuales VTR representaba menos de 0,40%. Además, alegaron que AMC tiene 17 millones de televidentes y VTR, un millón de suscritos.

No solo eso: VTR intentó —sin éxito— contrademandar a AMC, argumentando que la petición de dejar sin efecto el retiro de los canales no los dejaba competir en igualdad de condiciones con los otros cableoperadores. 'Las peticiones del Grupo AMC evidencian un objetivo evidentemente anticompetitivo, al buscar utilizar la Condición Quinta como una palanca de presión para alcanzar el objetivo comercial que no pudieron obtener en la negociación propiamente tal con VTR y que no es otro que el extraer rentas supracompetitivas gracias a su portafolio lineal, el cual carece de la relevancia que pudo haber tenido hace seis años', se lee en la contestación de VTR.

La firma de TV de pago fue requerida para este reportaje, pero declinaron responder. 'VTR tiene como política no pronunciarse sobre procesos en curso', dijeron.

Causa se transformó en contenciosa

'La petición de VTR al pedir al TDLC que le elimine las ocho condiciones es bien sencilla: que se eliminen esas restricciones, porque el resto de los competidores, muchos de ellos que tienen participaciones de mercado muy similares a las nuestras, no tienen ninguna condición', decía, confiado, Ponce en septiembre del año pasado.

Pero esta arista ante el TDLC también se complicó para VTR. Se opuso la Fiscalía Nacional Económica, Claro, Entel, Turner y CNN, y desde luego TVI y AMC. Solo obtuvo apoyo a su solicitud desde la Subsecretaría de Telecomunicaciones —la que en todo caso no se refirió a la condición quinta— y de Telefónica Chile.

A su vez, el TDLC definió que la causa de AMC contra VTR y la solicitud de VTR de levantar las restricciones se sumaran en una sola causa contenciosa. En palabras sencillas, el juicio ahora toma un cariz mucho más agresivo en cuanto a presentación de pruebas, y habrá testigos, estudios y un largo etcétera.

A VTR le urge poder competir no solo con otros cableoperadores, donde lo hace con Direct TV, parte del gigante AT&T; con Movistar, con las espaldas financieras de la operación española; con Claro y Entel, ambos con operaciones fuera de Chile y con accionistas que están dispuestos a poner más capital, sino que con las plataformas OTT (Over the Top), léase Netflix, Disney, Apple +, HBO Now, y un largo etcétera de nuevos operadores que ofrecen televisión offline.

Y para hacerlo, VTR quería incorporar más opciones con este nuevo 'deco' que anunciaron en septiembre, y que incluía un control que podrá manejarse por voz, grabar programas —incluso los que están agendados en la parrilla para más adelante—, así como reproducir de forma más rápida y sencilla programas que ya se emitieron, junto con mejorar la cantidad y calidad del contenido VOD. Pero la gran novedad era que en esta 'caja' vendría incorporado un acceso a aplicaciones como Netflix y YouTube, que también podría ser controlado por voz. Ponce esperaba que hacia fines de 2019 todos los clientes tuvieran el nuevo decodificador. Pero la realidad es que aún solo está haciendo pruebas en algunas zonas de la Región Metropolitana.

Recuadro
>>El objetivo de fondo de VTR es poder fortalecer su plataforma de VOD 2.0. Pero hasta ahora no ha podido lanzarlo masivamente.

>>Vanessa Facuse, abogada de AMC: 'Es importante que se mantengan las condiciones impuestas a VTR (...) Estas persiguen balancear la relación'

—¿Cuáles fueron las razones que dio VTR para sacarlos de la parrilla? ¿Hubo un período de negociación o fue una decisión unilateral?

'En nuestra demanda describimos que si bien hubo conversaciones tempranamente, en ningún momento sentimos que VTR haya tenido voluntad de llegar a un acuerdo, sino todo lo contrario. La decisión de negarse a mantener los canales de AMC fue unilateral e injustificada de parte de VTR. De hecho, nos enteramos a través de los usuarios, que en seguida nos escribieron que nuestros canales ya no serían transmitidos a contar de enero de 2019'.

'VTR exigía que se entregara una cantidad de horas para su plataforma On Demand, que implicaba un costo adicional para AMC, además de ofrecer condiciones económicas muy por debajo de las que estaban pagando'.

—¿Cómo se explica que los mismos canales que AMC le compró a Liberty Media sean luego sacados de esa parrilla? ¿Se dejó estipulado en el contrato alguna cláusula referente a este punto?

'Ciertamente, no existe justificación. El contrato de compra-venta entre AMC Network Inc Latin America y Liberty Media estipulaba la distribución de los canales por espacio de cinco años. Una vez terminado ese plazo, nos encontramos en la situación en la que actualmente estamos'.

—¿Cuál ha sido el efecto financiero para AMC de esta eliminación de la parrilla de sus canales? ¿En cuánto redujeron la venta de publicidad?

'El impacto financiero para AMC ha sido importante dada la relevancia de VTR en el mercado chileno. El peso de VTR en la muestra de Ibope —que realiza mediciones de audiencia— es predominante y eso impactó negativamente en las ventas de publicidad, que basan sus compras en estos números, además de la pérdida de ingresos por la transmisión de nuestros contenidos'.

—¿Confían en tener la razón ante los tribunales en su demanda luego de lo ocurrido con TVI? ¿Sentó un precedente el último fallo de la Corte Suprema?

'Confiamos plenamente en que nuestra demanda es procedente, justa y fundada. Respecto de TVI, no podemos comentar, no estamos involucrados en tal caso'.

—¿Qué les parece que VTR los haya demandado a ustedes luego de presentar su requerimiento al TDLC y solicitado incluso la aplicación de multas elevadísimas?

'Creemos que nuestra demanda es justa, y fue debidamente acogida a tramitación por el TDLC. Los argumentos que VTR esbozó en su demanda reconvencional francamente nos sorprendieron, pues demandarnos por el solo hecho de que AMC los demandó, haría que VTR fuera intocable. El TDLC ha desestimado la demanda reconvencional de VTR declarando su inadmisibilidad de manera unánime, por lo que a la fecha, más que ser una prueba que refleja la dureza del actuar de VTR respecto a los proveedores de contenidos, no tiene ningún efecto'.

—¿Qué tan importante es que el TDLC mantenga la condición quinta que se impuso en 2004 a VTR y que ésta quiere levantar?

'Creemos que es importante que se mantengan las condiciones impuestas a VTR en 2004 dado que estas cláusulas persiguen balancear la relación de peso entre el operador dominante en el mercado y los generadores/programadores de contenido. El objetivo real de estas cláusulas es el de proteger al consumidor final, al televidente chileno, quien tiene derecho a tener acceso a contenido de calidad y de diversos géneros disponible en el mercado, evitando que VTR abuse de su posición, excluyendo contenidos injustificadamente u ofreciendo condiciones económicas por debajo de aquellas que imperan en el mercado'.

—VTR dice que por dichas cláusulas, únicas para un cableoperador en Chile, no tiene la libertad de negociar quién está y quién no en su parrilla de canales.

'Las cláusulas son para que no abusen de su posición dominante en el mercado de la TV paga, que negocien precios de mercado en un entorno de razonabilidad, y no exijan al proveedor incurrir en costos que no tienen una contraprestación. En definitiva, se busca proteger al usuario final para que no se vea privado de ciertos contenidos por decisiones unilaterales del operador más importante del mercado'.

—¿Abusa VTR de su posición de mercado con los proveedores de contenido?

'No podemos hablar en nombre del resto de los proveedores de contenidos. Como lo detallamos en nuestra demanda, nuestra posición es que, en nuestro caso, VTR ha excluido nuestros canales de grilla de manera injustificada'.

—En 2016, Movistar también sacó canales de AMC de su parrilla, ¿por qué entonces no fueron a la justicia, qué razones se dieron en su momento?

'Eran otras circunstancias y, por ende, no correspondía aplicar el mismo camino que se tomó con VTR'.
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Nicolás Durante Parra . -