La Fundación Generación Empresarial está en un proceso de consulta con distintos directorios de empresas del país, con el objetivo de compartir buenas prácticas al interior de las compañías, para mejorar la calidad del trabajo al interior de estas. 'Es fundamental que los directorios prioricen en las agendas temáticas el bienestar de los trabajadores, su familia, además de los temas relacionados con la seguridad laboral, beneficios, corresponsabilidad parental, salud mental, etc.', comenta el presidente de la organización, Gonzalo Said, quien también es director de compañías como Embotelladora Andina y Scotiabank.

—Desde el mundo de las empresas, ¿qué autocrítica se hace respecto a lo que ha venido pasando desde hace casi dos años?

'Ha faltado más proactividad y enfrentar los temas, y no esperar tanto a que revienten para hacerse cargo. Se ve en las empresas que se ha ido en esa línea, esto venía antes de la pandemia. Lo que pasa es que (las empresas) muestran poco lo que hacen hacia afuera y eso es muy importante. También hay que ir mostrando lo que estas van haciendo'.

—El país hoy vive una profunda crisis de empleo, pero hay distintos actores que han señalado sobre problemas para contratar. ¿A qué lo atribuye usted?

'Efectivamente, por un lado, hay muchas empresas que ya están en condiciones de ir contratando. Hemos visto cómo se ha reactivado la economía y la demanda laboral ya despertó. Y, además, las condiciones sanitarias para permitir contratar gente, en que las empresas ya se adaptaron a esa nueva realidad. Pero pienso que realmente llegó el momento de pensar en retirar las ayudas del Estado'.

—¿Por qué?

'El IFE cuesta 1% del PIB mensual, y esto lo tenemos que entender como una política ultratransitoria, por el elevado costo que ella misma implica. Entonces, entre más nos demoremos en tener esa discusión, será más difícil retirarla. Porque lo que más ayuda a las familias es tener un ingreso permanente y no uno transitorio. Esto, al final, te lo da el empleo formal'.

—¿Cómo ve los apoyos a la contratación?

'Pienso que en ese sentido, el IFE laboral es un buen mecanismo para ir acompañando esta transición hacia el retorno de las personas al mercado laboral. Ahí hay un tremendo punto y se tiene que entrar en la discusión de ir haciendo una transición respecto de todas las ayudas económicas. Como decía, la demanda laboral está'.

—¿Esto implicará que las empresas deban subir sueldos?

'Quizás pase por ahí también. Y yo creo que hay empresas que están ofreciendo más, pero este tema hay que ir despejándolo en conjunto y poder ir haciendo una transición, para que el mercado laboral se active nuevamente y recuperemos rápidamente ese millón de empleos'.

—Si interpreto bien: ¿el gran problema para fomentar la contratación tiene que ver con las ayudas del Estado?

'En gran medida, sí. Y es un tema que, obviamente, tenía que existir, pero ya llegó la hora de empezar a retirarlas para que el propio sistema empiece a funcionar. Obviamente, hay cosas como reconversión laboral, que es otro mecanismo para mejorar el empleo, como la relocalización de la gente'.

—Dada la presión que hay sobre las finanzas públicas y la necesidad de recaudar más, ¿el sector empresarial está dispuesto a que se le suban los tributos?

'Yo puedo tener una opinión personal, pero la verdad es que acá estoy como presidente de Generación Empresarial y mi opinión personal puede comprometer a la propia fundación y nuestro quehacer'.

—¿Pero qué fórmulas se pueden impulsar para que el fisco recaude más?

'Así como las empresas están viendo este tema cuantitativo y cualitativo, en el sentido de ver en qué y cuánto estamos ayudando, quizás también se debe hacer a nivel de gasto total del país. (…) Se debe analizar lo que hay y a qué se está llegando, y quizás mejor dirigido puede solucionar mejor los problemas. Y desde ahí empezar a mirar las necesidades mayores que se requieren. Pero primero, hacer una suerte de presupuesto base cero. Es decir, en qué se está gastando, y si se está llegando y resolviendo realmente los problemas que existen'.

—¿Qué opinión tiene de cada uno de los candidatos que hay actualmente?

'Me es difícil contestar en el rol que estoy jugando, pero yo creo que todavía queda. Tenemos que ver qué pasa este fin de semana. Están mostrando los programas, así que hay que ir formándose la opinión en cuanto se cierre el proceso y sepamos los candidatos reales'.

—Y respecto del proceso constituyente. ¿La incertidumbre que había antes se profundiza, se mantiene?

'Respecto de la Convención, vimos la encuesta de Criteria que mostraba un 47% de desaprobación y un 30% de aprobación. Yo creo que lo más importante es que (la Convención) se valide y se den vuelta esos números, porque es muy importante que la institución sea válida y lo que salga de ahí esté validado por la gente'.