Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2019-03-24
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   24
Sección:   SOLO AUTO
Centimetraje:   29x24

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En esta zona, estas cinco pistas quedan reducidas a dos: una para vehículos y otra exclusiva para buses



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Hablan un magíster en desarrollo urbano y dos doctores en transporte
Tres especialistas explican por qué hay tanto taco en Independencia con Vespucio
Iván Poduje, profesor de la UC, postula que el conflicto radica en el corredor segregado de buses ubicado a tres cuadras de la intersección
Tacos de varias horas se producen en el sector de Avenida Independencia con Américo Vespucio, en las cercanías de la estación Metro Los Libertadores (nueva Línea 3), según relatan los vecinos del sector. La situación comenzó a generarse desde la entrada en funciones de un paradero de buses de Transantiago, en enero pasado, cuando se inauguró la Línea 3, y se origina en las pistas que van de sur a norte por Independencia. Clides Vega, residente en una de las casas del sector, que corresponde a la comuna de Conchalí, comenta que la congestión llegó a tanto en la última semana que incluso derivó en que 'los automovilistas, para salir del taco, se empezaron a subir a nuestra vereda'. La dueña de casa asegura que tiene a la vista la congestión 'todos los días desde las 5 de la tarde, o a veces antes, y el taco dura hasta las 9 o 10 de la noche. En las mañanas es un poco menos, porque hay control de carabineros'.

¿Qué motiva el taco? En la zona en cuestión, Independencia tiene cinco pistas de sur a norte, las cuales están divididas en dos por un corredor segregado de buses. Tres de los carriles se ubican por el lado poniente: dos son pistas para autos y una para buses. En tanto, las dos del lado oriente son solo para vehículos particulares Pero una cuadra antes de llegar a Vespucio, en dirección sur a norte y a la altura de la calle Nueva Huechuraba, se acaba la pista exclusiva de buses y se unifican las calzadas que estaban separadas por el corredor segregado (ver ilustración). De esta manera, una avenida que tenía cinco pistas pasa a tener dos: una para vehículos y otra exclusiva para buses. A esto se suma que en la esquina de Independencia con Américo Vespucio hay un paradero de Transantiago (Red) 'donde se hace un taco gigante por los buses que paran en ese lugar. Como la calle tiene además mucha demanda de autos, se hace muy angosta', comenta Juan Alberto Martínez, quien todos los días toma la micro en ese lugar. Cuello de botella El arquitecto y magíster en desarrollo urbano Iván Poduje, profesor de la UC, destaca que el problema no reside en el paradero de buses. 'Está bien ubicado ahí', afirma. A su juicio, el conflicto radica en 'el corredor segregado de buses, ya que este necesita mucho espacio para dar la capacidad exigida'. Por eso, agrega, 'a veces es necesario expropiar (terrenos) para implementarlos y cuando la superficie no es suficiente, se terminan angostando las calles y se genera un cuello de botella, como lo que ocurre en este caso'. Sebastián Seriani, doctor en estudios de transporte y académico de la U. de los Andes, opina que el corredor segregado de buses 'es un factor del embotellamiento', pero que no es una solución sacarlo porque 'la única manera de generar que baje la congestión vehicular es entregando más y mejores plataformas del transporte público, y los corredores son una medida' que apunta a eso.

El especialista estima que este tipo de situaciones se producen porque 'hay una desconexión entre las entidades públicas y privadas que están metidas en el tema'. A su juicio, 'falta una visión integral para ver los proyecto en conjunto. Se pueden mejorar los diseños siempre que haya un ente regulador y que todos las entidades estén bajo la misma coordinación'. Del mismo modo, el doctor en transporte y académico de la UDP, Franco Basso, explica que 'es una situación esperable que se genere una congestión luego de que acabe un corredor segregado de buses, porque este ocupa un espacio mayor que el de una pista normal. Por lo tanto, el efecto de cuello de botella es natural desde el punto de vista de las dimensiones que ocupa un corredor'. Desde el Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM), entidad encargada de la gestión de la locomoción pública en la capital, afirman que la parada de buses ubicada casi al llegar a Vespucio (vereda oriente) 'se consideró desde el inicio de Transantiago y se estableció de acuerdo a las parámetros establecidos; entre ellos, contar con paradas a menos de 350 metros de distancia y de los puntos de atracción importantes'. Respecto de la congestión, mencionan que 'estamos trabajando en un plan de mejoramiento de dicho punto para el segundo trimestre de este año'.
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PAULA ALTAMIRANO ORTIZ-