A ocho semanas de que se reportara el primer caso de Covid-19 en el país y a poco más de un mes de que el gobierno decretara las primeras cuarentenas totales en siete comunas de la Región Metropolitana, obligando a activar protocolos de teletrabajo, home schooling y clases online, la infraestructura de telecomunicaciones superó una prueba de fuego.

Es la conclusión a la que llegan expertos del sector luego de observar que pese a las mayores exigencias de conectividad, el aumento del tráfico de redes que la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) ubica entre 25% y 30% en las últimas dos semanas, y algunos reportes de lentitud en las conexiones y caída de Internet en varias zonas, el balance igual es positivo.

Roberto Gurovich, presidente de GyA Consultores, maneja cifras de entre 30% a 40% de incremento en el tráfico. 'Algo que es, por mucho, superior a los márgenes de seguridad de diseño de sistemas y redes', por lo que califica el trabajo realizado por los operadores como 'notable'. El presidente ejecutivo de la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones (Atelmo), Alfie Ulloa, reconoce que, en algunos casos, la experiencia del usuario decayó en comparación a una situación normal. Pero apunta que la respuesta del sector ha sido 'positiva', tomando en cuenta el contexto.

Es que a pesar de que aún persiste la brecha del 44% de familias que no tiene una conexión fija a Internet, Chile lleva la delantera en telecomunicaciones en la región, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE): es el país latinoamericano que está más cerca del promedio del bloque en adopción de fibra óptica, de acuerdo a su último informe de banda ancha con datos al segundo trimestre de 2019. Y hace dos semanas, el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) lo destacó como uno de los que tiene mayor índice de resiliencia digital en el hogar, y el más cercano en este ítem al promedio OCDE.

Para Ulloa, las redes chilenas son 'las mejores de América Latina' y, a su juicio, se han comportado a la altura del momento, soportando al país en modalidad remota y respondiendo a un 'aumento súbito de 40% en el tráfico de datos y hasta 60% en el de voz. Cierto que esto implicó una presión y estrés a las redes (...) pero considerando la circunstancia excepcional en que vivimos, la respuesta ha sido positiva y las compañías han adelantado su plan de inversión de redes: lo que esperaban hacer en los próximos ocho meses se desplegará en semanas'.

Infraestructura robusta

Fernando Saiz, vicepresidente de la Asociación Chilena de Empresas de Tecnologías de Información (ACTI) y director de Asuntos Públicos de Movistar Chile, cita cifras de esta compañía para graficar el incremento de tráfico en el tiempo libre: WhatsApp muestra un crecimiento de 67%, Netflix, 58%, y TikTok, la app de moda, ha aumentado su uso en 47%. José Miguel Piquer, académico de la Facultad de Cs. Físicas y Matemáticas de la U. de Chile, en el pasado ha criticado la infraestructura local por su 'tolerancia a cortes y fallas físicas', pero siempre ha reconocido su capacidad de tráfico. 'La infraestructura existente en Chile ya era muy buena y eso nos permite estar bastante confiados frente a un alza en el tráfico, que probablemente llegará a duplicarse este año', sostiene.

Mayor conectividad

A juicio de Ulloa, la forma en que se ha ido desarrollando el sector también ha sido clave: 'La cobertura se duplicó en diez años y hoy alcanza los 3,5 millones de hogares, dando servicio a unos 12 millones de personas. Si se suman los 25 millones de celulares en Chile (...), de los cuales 19 millones tienen acceso a Internet, tenemos una penetración de 170 accesos (fijos y móviles) por cada 100 habitantes'.

El gerente de Service Providers de Cisco Chile, Chris Delorme, resalta la evolución de las redes, destacando la velocidad de las conexiones fijas -'superiores a los 600 Megas al hogar y hasta 100 Gigas a las empresas-' y el avance de las móviles.

'El uso de una red 4G bien optimizada puede dar al celular más de 150Mb, algo más que suficiente para ver videos en Ultra Alta Definición o transferir archivos', ejemplifica y, al respecto, Ulloa define al despliegue de 4G como uno de los hitos clave del país en materia de conectividad, al punto que el 96% de las conexiones móviles se da en esa red.

Desde el punto de vista de la conectividad, Piquer acota que 'en general, las empresas han reforzado lo que se ha ido requiriendo, como las redes móviles, que son las que más sufren la carga'. Por eso, dice que el gobierno 'no ha tenido que intervenir mucho en este aspecto', pero sí ha mantenido los proyectos de inversión en fibra óptica, 'que es lo que permite que todo esto funcione'.

En este aspecto el presidente de Fundación País Digital, Pelayo Covarrubias, sostiene que quedó demostrado que había buen despliegue de redes previo al Covid-19, y que ahora se presenta la necesidad de profundizar su avance, 'principalmente en la conectividad a través de fibra óptica y capilaridad regional'.

Lo que viene

Todos coinciden en que ya pasó 'lo peor' y que no habrá un colapso de las redes, aunque el avance del Covid-19 prolongara la situación actual. Alfie Ulloa, de Atelmo, afirma que 'no existe' tal posibilidad, acotando que las compañías asociadas al gremio trabajan 24/7 para hacer mantener y expandir la capacidad de la red.

Con todo, Roberto Gurovich dice que lo que está pasando confirma que el rol de Internet en las sociedades es fundamental y que 'tiene la misma importancia, sino más, que las redes eléctricas'. En ese sentido, José Miguel Piquer, advierte que este es el momento de entender que la conectividad es un tema estratégico para cambiar el modelo de desarrollo que Chile venía aplicando.

'El proyecto de Fibra Óptica Nacional que el gobierno acaba de adjudicar es un buen ejemplo de esa nueva visión: ya no se trata de esperar a que los privados resuelvan el problema como ellos quieran; ahora el Estado fija reglas, trazado y uso de la infraestructura', argumenta.