En problemas está la industria nacional del reciclaje. Debido a la pandemia y a las limitaciones horarias; al cierre del comercio, a la baja de la industria y a la reducción del reciclaje hogareño, las empresas del rubro desde marzo han recibido menos material, con el consiguiente impacto económico y ambiental. Así lo indican las estimaciones de la Asociación Nacional de la Industria del Reciclaje A.G. (Anir). 'La recepción de material ha caído entre un 15% y un 50%, dependiendo del rubro', explica Alejandro Navech, gerente general de la entidad.

Según el ejecutivo, los acopios de materiales más comprometidos son las botellas pet, las de vidrio, las latas y los cartones, con una caída de 50%. 'Estos materiales los recolectan los actores de la industria de menor tamaño, como la persona que anda con un triciclo y aquellos que les reciben el material y los llevan a las empresas de reciclaje', explica Navech.

El problema de este tipo de recolectores es que su horario de trabajo se ha visto limitado por el toque de queda. Si bien la industria del reciclaje fue declarada como esencial por el Ministerio del Medio Ambiente, es decir, que puede operar en cuarentena y durante el toque de queda, existe un requisito formal que complica el trabajo del eslabón más pequeño de esta industria. 'Nuestros compañeros que recolectan en la calle en su gran mayoría son informales y para obtener el salvoconducto se requiere un rut de empresa. Eso hasta ahora nos ha limitado mucho, porque tenemos que usar un salvoconducto que dura dos horas', explica Soledad Mella, presidenta de la Asociación Nacional de Recicladores de Chile.

A la limitación horaria de ambos actores, se agrega la casi nula actividad comercial y la reducción de la industria. 'El cierre del centro de Santiago y del comercio en general nos golpeó muy fuerte, porque el cartón y el papel que generan ellos y las oficinas es muy importante. Ese material se recolecta en la noche, entonces son dos problemas: uno, que no se genera material por los cierres y, dos, que el que se genera no es acopiado de manera óptima por dichas limitaciones', señala Martín Walsen Arangua, gerente general de Reciclados Industriales, empresa que recicla cartones y otros materiales.

Otro tanto pasa con las botellas pet, la clásica bebida de litro y medio. 'La recolección de pet ha caído un 40% por las limitaciones de los recicladores de base y porque la gente está reciclando menos', explica Felipe Dutilh, gerente general de Recipet, empresa que trata este tipo de plásticos.

Tampoco lo pasa bien el sector de residuos industriales, como el aceite automotriz y otros. 'Las limitaciones de recoleción y la baja del petróleo ha complicado mucho nuestra competitividad. Actualmente sólo estamos trabajando para mantenernos, no sabemos cuánto más podemos durar', señala Francisco Cáceres, gerente general de Crowan, empresa que gestiona aceites y lubricantes usados.

La industria del reciclaje genera más de 160.000 empleos. En Chile, al año, se producen en torno a 2.100.000 toneladas de residuos y envases y embalajes post consumo domiciliario y no domiciliario, los que se dividen, principalmente en cartón para líquidos, metal, papel y cartón, plástico y vidrio. De ese volumen, sólo un 25% se recicla. A eso se suman los residuos automotrices, como baterías, neumáticos, aceite lubricante, etc., que generan un volumen de 300.000 toneladas y de las cuales se recicla en torno a 32%, de acuerdo a datos de Anir.

Si bien el tema comercial y de la industria solo se irá resolviendo en la medida que se vaya superando la emergencia sanitaria y reabra la economía, al menos el factor recicladores de base está en camino de resolverse. 'Luego de monitorear cómo ha operado el sector desde que fue declarado industria esencial, en las últimas semanas hemos optimizado los procesos para obtener los permisos e impulsar la operación de la industria', señala la ministra del Medio Ambiente, Cristina Schmidt.

'El Gobierno nos liberó este viernes un salvoconducto colectivo que nos permite operar con el rut de la Asociación Nacional de Recicladores de Chile y con él podremos operar', ratifica Soledad Mella.

En el caso de quienes les compran el material a esos recicladores más pequeños, la Anir estaba ultimando, este viernes, un documento para que ellos puedan operar. 'Nuestras 29 plantas asociadas van a emitir un certificado a sus proveedores que operan con rut de persona natural, gestionado ante la Seremi del Medio Ambiente, que demuestra que ellos son parte de una industria esencial, Con ello podrán trabajar sin ser detenidos', explica Navech.

El eslabón más débil actualmente es el del residuo domiciliario. 'Debido a la cuarentena muchos puntos limpios han cerrado, pero no podemos dejar de reciclar. Un recomendación es que se organicen los vecinos y reúnan material para que lo reciban los recicladores de base. Para ellos pueden comunicarse con su municipio o con la asociación que los reúne', agrega Schmidt.

De lo contrario, todo el material va dar a los rellenos sanitarios.