Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2020-06-14
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   B8
Sección:   Economía y Negocios
Centimetraje:   55x27

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Ariane Ortiz-Bollin, vicepresidenta y analista senior de riesgo soberano de Moody's Investors Service.
El Mercurio
Ariane Ortiz-Bollin, vicepresidenta y analista senior para Chile de Moody's:
Moody's proyecta una caída de 4,6% del PIB: “Nos preocupa, y puede definir el futuro de la calificación, el incremento en déficit y en deuda tan rápido”
El viernes, a última hora, la clasificadora actualizó sus proyecciones para Chile: una caída del PIB en 2020 superior al -2,4% que habían anticipado en marzo, y un déficit fiscal de 8,9% para este año, mayor al 7,8% previo. Sin embargo, mantuvo la calificación crediticia en A1, con perspectiva estable.
'Tengo que pasar todo el día pensando cómo se mueven a futuro otros países, cuando estamos viviendo un presente lleno de incertidumbres', responde al otro lado del teléfono, y desde Nueva York, Ariane Ortiz-Bollin, vicepresidenta y analista principal para Chile de Moody's, al explicar su trabajo en medio del escenario en el que se encuentra el mundo con la pandemia.

El viernes, a última hora, Moody's Investors Service realizó su última actualización de proyecciones para el país en medio del coronavirus. Si en marzo proyectaban una caída del PIB para 2020 de 2,4%, esta vez profundizaron el escenario negativo hasta el -4,6%. Sin embargo, apostaron por una recuperación más pronunciada para 2021: un crecimiento de 3,7%, superior al 2,5% que habían anticipado en marzo. Asimismo, modificaron sus estimaciones de déficit fiscal, pasando desde el 7,8% para 2020 que habían advertido en marzo, a un 8,9% en su última versión. Y para 2021, el déficit fiscal debiera llegar a 3,5%.

A pesar de que no cambiaron la nota ni la perspectiva, y la dejaron en A1 estable, la ejecutiva explica que hay temas que le preocupan, como la velocidad del incremento de la deuda nacional y la falta de claridad sobre cuándo y cómo se llegará a la convergencia fiscal. 'El Gobierno tiene menos espacio fiscal hoy que el que tenía antes, y esto genera riesgos crediticios y si no tenemos claridad de cómo se va a lidiar con eso, puede cambiar la clasificación del país', advierte.

La experta explica: 'La mediana de los países clasificados en A en 2019 en deuda era de 37% del PIB. Chile estaba 10 puntos por debajo de eso. Aunque las estimaciones ahora son que se acercaría al 40%, seguirá estando bajo 10 puntos, porque la mediana A para 2021 se estima que aumente hasta 50% del PIB. Es el ritmo de ese crecimiento y la falta de claridad de cuándo va a dejar de aumentar, la preocupación de Moody's', advierte.

Dentro de las buenas noticias es que proyectan un crecimiento para China de 1% este año, y que el próximo crezca 7%. 'Eso puede ayudar a que Chile reactive su economía relativamente rápido el próximo año'.

En particular sobre el escenario nacional frente al coronavirus, la analista indica que las proyecciones de caída del PIB obedecen a que 'el impacto del coronavirus en la economía chilena va a ser más severo, y el riesgo de que haya una contracción económica todavía mayor que la anticipada, ha aumentado. Esto tiene que ver con que la curva de contagios no se ha aplanado, y se ha tomado la decisión de extender no solamente las medidas de cuarentena, sino las áreas donde se van a aplicar de manera más estricta. Antes estábamos esperando que para el tercer trimestre de 2020 se iba a dar una gradual recuperación económica, y esta se ha postergado. Por otro lado, cuando una contracción es mucho más alta, es posible que se espere un rebote mayor al que estábamos esperando para el próximo año por un efecto de base'.

—¿Tienen una estimación para esa postergación en la recuperación?

'Pensábamos que el segundo trimestre iba a ser el más duro, pero ahora creemos que se ha prolongado para el tercer trimestre, pero todavía esperamos que para finales del tercer trimestre y el cuarto trimestre ya haya una recuperación. Ese es nuestro escenario base ahora'.

—¿Ha sido suficiente la respuesta económica del Gobierno hasta ahora? Hay sectores políticos que han criticado, por ejemplo, la tardanza en garantizar un ingreso mínimo para que la gente se mantenga en cuarentena.

'En términos comparativos, la respuesta del gobierno ha sido —junto con la de Perú—, la más fuerte en términos de alcance y de monto. Mitiga el impacto, y se esperaría una contracción todavía mayor si no hubiera sido por este tipo de medidas, pero no va a contrarrestar el impacto. Sí notamos que el hecho de que se extiendan las medidas de contención social es porque mucha gente no se está quedando en sus casas, y una de las explicaciones puede ser porque la gente tiene la necesidad de salir a trabajar y buscar formas de emplearse'.

—¿Es sostenible para un país como Chile suplementar por un largo periodo de tiempo los ingresos que las familias no están pudiendo generar?

'Todo depende del monto, el diseño y la transitoriedad. Si es algo que se está diseñando específicamente para mitigar el impacto de que la gente se quede en casa, y es algo que se puede retirar después, tiene un costo fiscal importante, pero puede ser que sí sea sostenible. Hasta ahora el diseño estaba para tres meses, y están en discusión de nuevos apoyos. Entonces eso va a ser importante para determinar si es sostenible o no. Chile es un país que tiene una fortaleza fiscal muy alta. Esto significa que tiene sus colchones financieros de los ahorros que se hicieron en periodos de alto crecimiento y precio de commodities, y tiene un nivel de deuda todavía relativamente bajo en términos comparativos, lo cual implica que hay un espacio fiscal para endeudarse'.

—¿Cuál es ese espacio para endeudarse del que habla? ¿Usarlo todo puede llevar a una baja de nota?

'A nivel de soberanos hemos dicho que vamos a tomar un enfoque mesurado a la hora de evaluar el impacto crediticio de la pandemia. Es una crisis que ha afectado a todo el mundo y casi todos los países van a enfrentar una contracción económica, mayor gasto, mayor deuda. Entonces todo el mundo se va a ver peor. Eso también lo estamos tomando en cuenta a la hora de ver cuánto espacio más tiene Chile en relación a sus pares. Si esto fuera un shock que le pasara a Chile solamente, hubiera sido más evidente el deterioro de la nota, pero la posición de arranque de Chile es muy buena, comparativamente hablando.

Algo que sí nos preocupa, y que puede definir el futuro de la calificación, es esta tendencia de incremento en déficit, y en deuda, tan rápido. Muy pocos países han aumentado su nivel de deuda en casi 10 puntos de PIB solo en un año y puede ser más. Y de largo plazo, pueden ser hasta 20 puntos de PIB en solo cinco años. Esto es sustancial y muy pocos países tienen un aumento de deuda tan rápido. Entonces, a futuro, si no tenemos claridad sobre cómo las autoridades van a lidiar con varias presiones de gasto, ya sea por las demandas sociales o por la pandemia, y al mismo tiempo con una tasa de crecimiento que va a ser más baja, entonces se pudiera dar un deterioro en el perfil crediticio, sobre todo si no tenemos claro cómo y cuándo se va a dar una consolidación fiscal que permita la estabilización de la deuda'.

—¿Esto lo evaluarán inmediatamente después de conocer los detalles del acuerdo político que trabaja el Gobierno con el Congreso?

'Eso es un riesgo de mediano plazo. Entendemos que el Gobierno está hoy enfocado 100% en lidiar con la pandemia, evidentemente estaremos muy atentos de estos detalles del acuerdo porque puede que tengan impactos duraderos. Normalmente nuestra clasificación no debiera cambiar por algo que impacte un año o dos, pero si esto tiene efectos permanentes, sí puede impactar la calificación. Si tenemos claridad de cómo se va a lidiar con esto a futuro, eso sería positivo para el perfil crediticio. Hoy en día no tenemos esa claridad'.

—Esta semana el Gobierno presentó un plan de US$ 10 mil millones, mientras que un grupo transversal de economistas lo planteó en US$ 12 mil millones a 24 meses, ¿le parece que las propuestas van en la senda correcta o son un riesgo para la clasificación de Chile?

'Mi enfoque es cómo estos montos van a impactar el déficit y la deuda, y la naturaleza de los apoyos que se van a dar, si son transitorios o incrementan el gasto de manera permanente. Al final, los riesgos crediticios que vemos son los mismos de antes del covid-19: manejar la demanda por más y mejores bienes y servicios y lidiar con una tasa de crecimiento en promedio menor a la anterior. Pero el doble shock de las protestas sociales y la pandemia ha amplificado estos riesgos'.

—En Chile como en otros países, medidas transitorias para una crisis puntual se transforman en permanentes por una presión política. ¿Ven ese riesgo ad portas de un debate constitucional y de varias elecciones en el mediano plazo?

'Algo que ha sido muy importante para la clasificación de Chile ha sido la fortaleza institucional y de políticas públicas del Gobierno y del país, y del consenso que hay entre derecha e izquierda, Gobierno y Congreso, de buscar medidas de gasto permanente, si es que hay un aumento permanente en los ingresos. Si bien el discurso político se ha deteriorado, y hay más ruido que antes, ese consenso sigue vigente y es algo muy importante que tomamos en cuenta. Nuestro supuesto es que estas medidas van a ser transitorias, y si no lo son, se va a encontrar una manera de financiarlas o de buscar que el nuevo nivel de deuda o fortaleza fiscal se estabilice. Si esto no se cumple, sería un deterioro importante para la fortaleza institucional del país'.

—Sobre el presupuesto 2021, ¿ven espacio factible para reducir el déficit fiscal que se calcula en 8% para este año, si aún estaremos viviendo los estragos de la pandemia?

'Nuestro supuesto y que está en nuestra clasificación, es que el aumento del déficit de este año va a ser muy alto y sin precedentes, pero que va a haber una reducción importante el próximo año. No a los niveles que se tenía antes del covid-19, pero sí que va a haber una reducción gradual. Un déficit del mismo tamaño de 2020 en 2021 sería algo que no estamos considerando y que iría en contra de nuestras expectativas crediticias actuales'.

—¿Cuándo debería iniciarse la convergencia fiscal, después de los 20 o 24 meses del plan de emergencia o ahora?

'Dado que se anunció que se van a extender las medidas de apoyo, mi expectativa es que el próximo año iniciaran conversaciones en torno a cómo se va a dar y cuándo una consolidación fiscal, teniendo riesgos importantes: un referéndum para saber si hay una nueva Constitución y elecciones presidenciales. Es difícil pensar que para el próximo año se van a dar medidas concretas, pero la expectativa es que al menos haya conversaciones serias'.

—¿Cuánto influye en la clasificación de Chile que se mantenga el debate constitucional en medio de la pandemia?

'La manera en que pensamos que el proceso de redactar una nueva Constitución afecta el perfil crediticio, es a través del impacto que puede tener en inversión y, por lo tanto, en el crecimiento económico. Una de las ideas por las cuales creemos que el rebote en el 2021 puede no ser tan alto, es precisamente por la incertidumbre que esto va a generar en la inversión y en el clima de negocio. El que esto se postergue todavía más, puede hacer que hasta el 2022 sea un factor que afecte decisiones de inversión y esto aunado al proceso de elecciones presidenciales que va a haber el próximo año'.

Recuadro
-"Los riesgos crediticios que vemos son los mismos de antes del covid-19: manejar la demanda por más y mejores bienes y servicios y lidiar con una tasa de crecimiento en promedio menor a la anterior. Pero el doble shock de las protestas sociales y la pandemia ha amplificado estos riesgos'.

-"Un déficit del mismo tamaño de 2020 en 2021 sería algo que no estamos considerando y que iría en contra de nuestras expectativas crediticias actuales'.

-"Si no tenemos claridad sobre cómo las autoridades van a lidiar con varias presiones de gasto, ya sea por las demandas sociales o por la pandemia, y al mismo tiempo con una tasa de crecimiento que va a ser más baja, entonces se pudiera dar un deterioro en el perfil crediticio'.
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Nicolás Durante Parra.-