Está comprobado que la forma de contagio más directa es de persona a persona, por lo que la distancia física sigue siendo la recomendación principal para evitar contraer el tan temido Covid-19. Sin embargo, por meses las autoridades han llamado a la población a evitar el contacto de superficies de alto tráfico, pero pasa nada.

Cumplir la recomendación complica a la población que se ve expuesta a tocar los tableros de los ascensores y pasamanos en la locomoción colectiva. ¿Cómo evitarlo? Hasta el día de hoy la solución eran los guantes, los cuales van acumulando los gérmenes de todo lo tocado. No tocarlo sería lo ideal, algo que pensaron los representantes de Bacuplast, empresa que fabricó un "pulsador-tirador", que se transforma en la extensión de nuestra mano, con el cual podemos enganchamos de los pasamanos en el trasporte público, tocar botones de cualquier tamaño e, incluso, enganchar las bolsas del Delivery.

"En Bacu diseñamos una línea de pulsadores D2 One para ser una extensión de las manos y para evitar el contacto con superficies de alto tráfico, así disminuyendo las posibilidades contagio de virus, gérmenes, bacterias y hongos, de las manos al rostro, lo que hoy reviste un alto riesgo", señala Giovannino Baselli Fernández, representante de Bacuplast.