La construcción está retomando progresivamente su actividad y muestra algunos indicadores semejantes a los de la última parte de marzo, cuando partieron las cuarentenas masivas en el país. Luego de eso vino el deterioro más fuerte para este sector y la economía en general. Así lo revelan datos de Iconstruye —plataforma digital ligada a la Cámara Chilena de la Construcción— relacionados con órdenes de compras, montos transados por los proyectos en cuanto a adquisición de materiales y también el inicio de nuevas faenas, que nunca antes habían tenido movimiento. Respecto de esto último, entre agosto y lo que va de septiembre se iniciaron en el país 41 nuevas obras de construcción principalmente residenciales, de oficinas e industriales. Esa cifra supera a las 32 faenas que partieron en todo el segundo trimestre de este año, cuando la pandemia azotó con mayor fuerza al país. Sin embargo, la reactivación está lejos del ritmo del primer trimestre, cuando en total comenzaron 152 iniciativas, con un promedio de 50,6 mensual.

Por otra parte, la semana pasada, las órdenes de compra de materiales de los proyectos totalizaron 19.494, la cifra más cercana a las 21 mil órdenes de fines de marzo, cuando se comenzó a agudizar el declive en este ítem. A la vez, el número es 75% superior al de hace dos meses. Los montos transados en la compra de materiales durante la semana pasada sumaron $33.207 millones, la cantidad más próxima a los $36 mil millones registrados al término de marzo pasado y 85% mayor a la cifra de hace dos meses. Pese a ello, en el primer trimestre de 2020, las transacciones semanales fluctuaron entre los $42 mil millones y $ 50 mil millones. 'Hay una reactivación progresiva. Algunas empresas tienen más cautela que otras. Hay constructoras que dicen que no van a comenzar nada hasta después de octubre, otras parten con una o dos iniciativas y otras que dicen reanudarán todo', comenta el gerente de Estrategia y Desarrollo de Iconstruye, Pedro Pablo Mir. Agrega que 'la reactivación conlleva costos por los protocolos sanitarios y el transporte de los obreros'.

El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Antonio Errázuriz, indica que hasta el martes pasado, el gremio había recibido solicitudes de permisos para reiniciar 416 obras —90% en Santiago—, que equivalen al 59% del universo de los proyectos habitacionales paralizados que se ubican en comunas en transición y preparación. De esa cantidad, 217 iniciativas ya obtuvieron el permiso que otorga el Gobierno. Al respecto, Errázuriz explica que 'nuestro gremio tiene un rol de articulador en el proceso que deben realizar las empresas para reiniciar sus obras con trabajadores que viven en comunas en cuarentena. Para ello, las empresas socias y no socias deben subir sus antecedentes a una plataforma dispuesta por la CChC, para verificar primero si están adheridas al protocolo sanitario y si cuentan con el plan de retorno a la actividad validado por la mutualidad correspondiente. Luego se envía esta información al Ministerio del Interior, el que otorga el permiso, y finalmente, la Cámara comunica a las compañías si su autorización está aprobada'.

El timonel de la CChC afirma que la reactivación de las faenas 'se está dando en forma paulatina, pero dada la situación del sector, sin duda existe un gran interés por reanudar las obras. Por lo mismo, las empresas están recurriendo al programa del Gobierno cuando necesitan contar con trabajadores que viven en comunas que siguen en cuarentena, aunque ello les signifique un aumento relevante, del orden del 35%, del costo de la mano de obra, el que a su vez tiene una alta incidencia en el costo total de los proyectos'. Errázuriz señala que 'la reactivación del sector se va a producir solo cuando se vuelvan a poner en marcha todas las obras y se asegure su continuidad operacional, en la medida que cumplan con el protocolo sanitario y nuestra industria siga mostrando los bajos niveles de contagio que exhibe hasta ahora'.