Treinta minutos con 30 segundos. Eso duró el discurso del Presidente Sebastián Piñera transmitido ayer ante la Asamblea General de la ONU, intervención en la que, entre otras cosas, abordó el estallido social originado el 18 de octubre del año pasado.

Casi al final de su alocución, el Mandatario dijo, primero, que "durante estos últimos 30 años no supimos aprovechar con suficiente fuerza las capacidades del crecimiento y del desarrollo para reducir con más voluntad y velocidad las desigualdades excesivas, para frenar abusos, para avanzar hacia una mayor igualdad de oportunidad, para dar servicios de mayor calidad en áreas tan importantes como la educación, la previsión o la salud".

Así, comentó que "en Chile, ciudadanos de todas las edades, de todos los sectores, salieron a las calles a demandar mejores pensiones, mejor salud y mejor educación", agregando que "el gobierno escuchó con atención y puso rápidamente en marcha una nueva agenda social".

Fue en ese contexto que Piñera comentó que también hubo "grupos minoritarios que provocaron una enorme explosión de violencia", por lo que -sostuvo- tuvieron que emprender acciones para resguardar el orden público. Y recalcó que se tomaron "todas las precauciones posibles y necesarias para garantizar el respeto de los derechos humanos de todos nuestros compatriotas".

Así, Piñera enumeró un conjunto de acciones y aseguró que "vamos a hacer todos los esfuerzos para que en Chile no haya impunidad, ni para los que vulneran derechos ni para los violentistas", dichos que se dan ad portas de la conmemoración del aniversario del 18-0 y en medio de las investigaciones y sumarios pendientes por el actuar de Carabineros durante las movilizaciones.

Además, el Jefe de Estado reivindicó en su intervención ante la ONU el proceso constituyente de cara al plebiscito, haciendo hincapié en que el "gobierno y Chile optaron por una salida institucional" al conflicto. Esto, en un contexto en que el gobierno busca renovar su imagen país, que quedó -dicen en el Ejecutivo- dañada tras el estallido social.

"Esta crisis representa una oportunidad para lograr un acuerdo constitucional que permita que nuestra Constitución sea ese gran marco de unidad, de estabilidad y de proyección hacia el futuro. Y es también una oportunidad para conectarnos mejor con nuestros ciudadanos y seguir avanzando con mayor fuerza y urgencia hacia una sociedad más libre, justa, con mayor igualdad de oportunidades", agregó.

El discurso de Piñera también incluyó una serie de temas, como la lucha contra la pandemia del coronavirus y la situación que existe en Venezuela. Sobre esto último, el Mandatario dijo que "estamos convencidos de que la mejor solución para superar la crisis en Venezuela es la constitución de un gobierno de transición y que realice elecciones libres y democráticas, para que sea el pueblo venezolano el que pueda elegir soberanamente y con plena libertad a sus gobernantes y sus caminos a recorrer en el futuro".