La Asociación de Banqueteros de Chile (Abach) continúa en su misión por conseguir un protocolo para realizar celebraciones en centros de eventos. Luego de que el gremio alegara haber sido excluido del plan 'Paso a paso' del Gobierno, logró reunirse el 3 de septiembre pasado con la subsecretaria de Salud, Paula Daza, para plantear sus inquietudes.

'Ella escuchó nuestra problemática y entendió nuestra situación', contó la presidenta de Abach, Sofía Jottar. Sin embargo, el punto en el que no ha habido acuerdo ha sido el aforo que pueden tener las celebraciones en estos centros. 'Eso es lo que nos tiene entrampados', dijo Jottar. De acuerdo con lo establecido por el plan, en la fase 3 están permitidas las reuniones sociales de un máximo de 25 personas en espacios cerrados y de 50 participantes en un lugar abierto. Esta normativa rige tanto para lugares de eventos como casas.

'Nosotros pensamos que esto no corría para los centros de eventos, porque es ridículo que en un salón de 1.000 metros cuadrados se junten 25 personas y en una casa en un espacio de 30 metros cuadrados se puedan reunir los mismos 25 invitados', sostuvo Jottar. Por esto, Abach solicitó que a estos establecimientos se les otorgue el mismo aforo de los restaurantes, los cuales actualmente pueden operar con un 25% de su capacidad, la cual está definida de acuerdo a los metros cuadrados por persona en el lugar. Tras la reunión, se acordó formar una mesa de trabajo que esta semana se juntará por segunda vez. Luego de esto, se agendaron encuentros con el vocero de Gobierno, Jaime Bellolio; el Ministro de Defensa, Mario Desbordes, y la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell. Otra de las preocupaciones del Gobierno, dijo la presidenta de Abach, es la interacción en la pista de baile. Como solución a esto, el gremio propuso establecer una capacidad diferente para ese espacio, la cual será fijada según el plan del Gobierno.

Es decir, si el centro de eventos está en una comuna en fase 3, la pista de baile podrá tener 25 personas si es que está en un lugar cerrado y 50 si es que está en una terraza. Otra propuesta de Abach es implementar un pasaporte sanitario para las reuniones sociales que, según Jottar, permitirá 'pretrazar' a los participantes. Jottar dice que la sobrevivencia del rubro está en juego y que urge la necesidad de establecer un protocolo oficial para que los banqueteros puedan planificar con responsabilidad, pero que al mismo tiempo les permita operar de una forma viable económicamente. A su vez, agradeció la disposición de las autoridades y cree que se logrará llegar a un acuerdo con el Gobierno. 'Hay voluntad para discutir el tema del aforo, seguimos trabajando para poder publicar un protocolo para que las personas estén protegidas, pero también haya empleo en el rubro', sostuvo. De acuerdo con cifras del gremio, la industria de banquetes y centros de eventos entrega empleo directo a 258 mil personas.