Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2020-09-25
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   B4
Sección:   Economía y Negocios
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Estudios indican que el ahorro puede ser de 25% mensual frente a una oficina tradicional.
El Mercurio
Demanda de oficinas flexibles crece con fuerza tras gradual desconfinamiento
Desde principios de agosto, expertos del sector han detectado un mayor interés por este modelo, lo que podría impactar en el rubro inmobiliario.
La crisis sanitaria ha puesto en evidencia la importancia de la capacidad de flexibilidad dentro de las empresas. Desde marzo, gran parte de estas se vio obligada a seguir con sus funciones de manera remota y, en su mayoría, teniendo que improvisar oficinas para hacerlo.

Ahora, que muchas comunas han comenzado un gradual desconfinamiento, la pregunta que se hacen las compañías y sus colaboradores es cómo volver al trabajo, más aún cuando la crisis provocada por la pandemia ha empujado a varias empresas a terminar sus arriendos, elevando la vacancia de oficinas. Desde Co-Work Latam, empresa de oficinas flexibles y espacios de cowork, han visto que la demanda por oficinas flexibles que se puedan adaptar a estos nuevos desafíos se ha quintuplicado desde principios de agosto y que esto va a impactar fuertemente en el rubro inmobiliario.

Señalan que han cerrado nuevos contratos con Casa de la Cerveza, Alto Andes Films, Krebs Consultores, Burn to Give y Transvip, entre otros. "Hoy vemos que las empresas están más dispuestas a considerar nuevas formas de trabajar con modelos que les entreguen mayor flexibilidad de costos y opciones a sus trabajadores", explica Sebastián O'Ryan, gerente general y fundador de Co-Work Latam. Estudios de la industria indican que el ahorro puede ser de 25% mensual frente a una oficina tradicional, al considerar costos como el mantenimiento, limpieza y adecuación de las oficinas al trabajo.

Dado el actual escenario, O'Ryan comenta que están impulsando modelos híbridos, que consisten en una oficina central, donde pueden concentrar las reuniones y coordinar los equipos, o sedes satélites, que estén más cerca del lugar donde viven los trabajadores, entregándoles lo necesario para cumplir con sus labores de forma remota. "Cada empresa tiene trabajadores con distintas necesidades. Algunos van a necesitar volver, porque no cuentan con un área de trabajo adecuada (...); otros, ir dos días a la oficina, y el resto, trabajar remotamente", comenta O'Ryan.