Así como poco más de 50 colegios han reabierto, también lo han hecho algunos jardines infantiles del país. La Subsecretaría de Educación Parvularia informó que han regresado 17 establecimientos (4 en Aysén, 7 en Los Ríos, 1 en el Maule y 5 en Valparaíso) y registran 123 solicitudes para retomar actividades.

La subsecretaria de Educación Parvularia, María José Castro, afirma que han elaborado exhaustivos protocolos para garantizar que se respeten las medidas sanitarias dentro de los recintos. Por ejemplo, que se tome la temperatura al ingresar, que los niños puedan estar sin mascarillas, pero las educadoras sí deben utilizarlas durante la jornada, demarcar los espacios para incentivar el distanciamiento social, entre otras. Eso sí, afirma que el plan busca 'propiciar las medidas, ayudándolos a que mantengan la distancia social, pero no podemos ser rígidos con eso, porque los niños chicos, sobre todo, podrían incluso insegurizarse u ocurrir el efecto contrario si vamos a estar exigiéndoles una rigidez que no pueden cumplir'.

Castro afirma que han insistido en la apertura porque 'sabemos que lo que ocurre en la etapa de los niños más pequeñitos, antes de los seis años, es imposible de reemplazar en años posteriores y también es imposible de reemplazar por un modo online'. Y añade que el acompañamiento virtual puede ayudar, 'pero nada puede realmente compararse con lo que ocurre en una actividad presencial con educadoras, con otros niños'.

La subsecretaria está en la Región de Los Ríos, donde visitó establecimientos abiertos, como el Colegio Alcázar, que retomó las clases presenciales el 17 de agosto. Ingrid Opazo, la sostenedora y directora del recinto —que educa a niños de entre tres y cinco años—, califica el regreso como 'excelente' y detalla que 'los niños y familias deseaban ya volver a un contexto más o menos dentro de lo normal, pero con exigentes protocolos y prácticas adicionales'. Detalla que tienen, en promedio, una asistencia de entre 12 y 15 menores por jornada y reitera que 'ha sido fabuloso porque estaban agotados, con los papás trabajando; entonces, al venir acá vuelven a tener sistema, rutina'.

Kanda Reyes es sostenedora y educadora del jardín Mi Mundo, también de Valdivia. Este recinto retomó sus actividades el 31 de agosto. Partió con dos niños y ahora asisten 10 párvulos, en un grupo heterogéneo de entre dos y cinco años. En marzo eran 50. Actualmente están en jornada presencial desde las 8:00 horas y hasta las 17:00, pero simultáneamente, 'nos conectamos con los que están en la casa' desde las 14:30 horas. Destaca que durante esta experiencia, lo más relevante ha sido la conducta de los niños: 'Ha sido súper gratificante (…). Al ver a los niños, de los dos años que llevo trabajando en educación jamás había visto la cara de los niños tan felices, jugando, disfrutando'. Y afirma que han cumplido estrictamente los protocolos sanitarios para evitar brotes en el jardín.

Pablo Fernández (32) es el padre de Lucas (4). Su hijo asistía al jardín Mi mundo y retomó las clases presencialmente la primera semana de septiembre. Cuando volvió eran cinco párvulos. Él es médico del Hospital de Valdivia y su esposa es dueña de casa, pero dice que enviaron a Lucas de vuelta al jardín porque este lo quería: 'Estaba más irritable y nos preocupaba su educación y que siguiera interactuando con los niños y la tía'. Comenzaron con media jornada para probar y evaluar la seguridad sanitaria y ahora asiste en el horario completo. Dice que ha sido positivo para Lucas y que 'uno nota, aparte de su mejoría educativa, que se lava las manos en la casa, saluda con el pie. Se han preocupado bastante en la parte de enseñanza'.

Suspender temporalmente

Sin embargo, ambos recintos forman parte de los cinco que habían abierto en Valdivia y que deben suspender nuevamente sus actividades presenciales, ya que ayer el Ministerio de Salud informó que esa ciudad es una de las cuatro comunas de Los Ríos que desde el sábado retrocederá a la fase de Transición. Frente a eso, Kanda Reyes dice que cumplirán la medida y volverán a la modalidad online por completo: 'Lamentablemente, este virus es muy dinámico... Y debemos seguir las indicaciones de autoridades por el resguardo de nuestra comunidad educativa', dice.

La subsecretaria Castro plantea que su plan 'contempla que las distintas comunas y localidades puedan retroceder en sus números sanitarios porque estamos viviendo una pandemia', y el retorno debe ser 'seguro y flexible'.

Precisamente por toda esa incertidumbre es que otros sostenedores dudan sobre reabrir sus jardines. Así lo afirma Marcela Olivares, representante de la Agrupación de Jardines Infantiles Particulares Unidos, que agrupa a 570 recintos nacionales. Dice que les preocupa un rebrote y también las consecuencias económicas: 'Imagínate que abrimos y en dos semanas tenemos que cerrar de nuevo, como pasó en Europa, y nos tenemos que hacer responsables de todo'.