Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2021-02-23
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   11
Sección:   Opiniones
Centimetraje:   28x6
La Segunda
La sustentabilidad empresarial es hoy
Históricamente, el interés de las empresas se centraba en aumentar la producción, reducir costos y mejorar márgenes, en ocasiones a costa de los trabajadores o de la explotación indiscriminada de recursos y altos niveles de contaminación.

Pese a que los científicos se encuentran hace décadas anunciando los efectos de la crisis climática, ha tomado bastante tiempo para que esta sea una preocupación mundial. Similar a esto, en Chile la desigualdad ha sido un tema sin arreglo por muchos años, lo que finalmente explotó con el estallido social de fines de 2019. Afortunadamente, ambas crisis están acelerando un cambio de mentalidad importante en las empresas, haciéndolas incorporar la sustentabilidad ambiental y social en su quehacer. De a poco se están dando cuenta de que incorporar estas temáticas las ayuda a ser más eficientes, a anticiparse a crisis y a mejorar la visión que los consumidores tienen de sus productos, entre otros beneficios.

Pero preocuparse de temas ambientales, sociales y de gobernanza no es sólo algo que los consumidores están pidiendo. También es algo que los inversionistas toman en cuenta. A través de los criterios ESG (Environmental, Social and Governance), quienes invierten buscan conocer qué hacen las empresas en materia de sustentabilidad, y aquellas con un mejor registro de ESG producen retornos más altos a tres años, con más probabilidades de convertirse en acciones de alta calidad y reduciendo la posibilidad de grandes caídas de precios, de acuerdo con Bank of America Merrill Lynch.

Según estimaciones de JP Morgan, las inversiones en activos que cumplen con criterios ESG representarán la principal clase para mayores asignaciones este 2021, puesto que su adopción se duplicó en 2020, pasando de tres billones en 2019 a cerca de 7,2 billones en el año pasado. Para quienes aún no comienzan, ahora es cuando incorporar la sustentabilidad en sus empresas: es el piso mínimo que las compañías deben tener para mantenerse competitivas.

Desde Desafío 10X queremos aportar a la generación de un ecosistema empresarial más sustentable. Por esto invitamos a compartir de manera más justa el valor que generan las empresas y a reducir sus brechas salariales por medio de alguno de estos dos compromisos: establecer un sueldo mínimo de 22 UF y/o limitar la brecha a un máximo de diez veces entre el sueldo más bajo y el más alto de la compañía.
Pie de pagina
Michelle Senerman Directora ejecutiva Desafío 10X -