Hace prácticamente un año, el 18 de marzo pasado, fue publicado en el Diario Oficial el primer decreto que declaraba el Estado de Excepción Constitucional con un plazo inicial de 90 días. Ahora, el reciente anuncio de que el Gobierno buscará extenderlo -antes de su vencimiento el 13 de marzo- ha generado reacciones diversas al interior del Parlamento.

Esta vez, a diferencia de las tres anteriores, la medida requiere de la aprobación de la Cámara de Diputados y el Senado. Ambos órganos, además, únicamente podrán aceptar o rechazar la propuesta, sin posibilidad de modificarla. En este escenario, pese a que el presidente se muestra confiado respecto al proyecto de ley que enviará en los próximos días, han surgido ciertas dudas sobre su aprobación en el Congreso. Mientras hay quienes consideran que la prórroga se justifica por la contingencia sanitaria, otros critican la prolongación de esta medida, y en particular, la permanencia del toque de queda.

EN LA CÁMARA BAJA

Dentro de los diputados y diputadas que representan a la región de Valparaíso, Carolina Marzán (PPD) considera que "no es necesario extender el Estado de Catástrofe para justificar restricciones de libertades y derechos que se pueden hacer por ley, por ejemplo a través del Código Sanitario" y que "no hay fundamento en la emergencia para continuar con toques de queda".

En la misma línea, Diego Ibáñez (CS) asegura que la extensión del régimen de excepción "es un debate abierto", pero que "si se va a usar el Estado de Excepción para imponer el toque de queda por parte del Ejecutivo, el Congreso, a mi juicio, va a estar en desacuerdo".

Andrés Longton (RN), en tanto, opina que "mientras no tengamos medianamente controlado el virus -lo cual va de la mano con la vacunación masiva- creo que se justifica plenamente que se extienda el Estado de Catástrofe, precisamente para poder extender el toque de queda, limitar la circulación y disminuir el flujo de gente en las comunas con mayores contagios, donde creo que cabe gran parte de la región de Valparaíso".

Pese a que respalda la prórroga bajo el mismo argumento, Camila Flores (RN) se opone a ampliar la vigencia del toque de queda. "Está comprobado que no necesariamente tiene incidencia en la disminución de los contagios, por lo tanto más bien ha dañado otra de las áreas que están muy afectadas en el país: la economía", dijo.

EN LA CÁMARA ALTA

De la misma forma que en la Cámara Baja, miembros regionales del Senado tienen posturas contrapuestas. Uno de los principales opositores a extender el Estado de Catástrofe es Juan Ignacio Latorre (RD), quien manifiesta que "responde más a una estrategia de control social del conflicto que a una estrategia sanitaria, sobre todo cuando vemos que hay medidas contradictorias o que generan confusión en la ciudadanía, como el interés del Gobierno por retomar las clases presenciales. Se abren malls, restaurantes y cines, pero se mantiene el toque de queda. Creo que no es claro el aporte a lo sanitario", concluye.

La senadora Isabel Allende (PS) se suma a quienes miran con desconfianza la propuesta del Gobierno. "Previamente, se hace necesario conocer la evaluación sobre la efectividad de una medida como esta a casi un año de su implementación. No se trata simplemente de fumar una suerte de cheque en blanco, sino que el Ejecutivo debe dar cuenta de lo que ha significado el Estado de Excepción, y tal vez estudiar modificaciones, por ejemplo en el toque de queda", indica. "No estoy dispuesta a avalar medidas que puedan significar una militarización encubierta en la macro zona sur de nuestro país", advierte además sobre la situación en la Araucanía.

En la vereda opuesta, Francisco Chahuán (RN) dice estar "absolutamente de acuerdo" y esperar que la iniciativa logre tener respaldo en el Congreso.

"Nosotros hemos venido pidiéndole al Gobierno durante varias semanas la extensión del Estado de Excepción Constitucional, básicamente puesto que todas las medidas de carácter sanitario o de restricción de actividades económicas se sustentan justamente en él", afirma agregando que el proceso de vacunación también se apoya en esta herramienta.

Finalmente, el senador Kenneth Pugh (Ind. pro RN) reflexiona que "en una sociedad disciplinada y madura, ninguna de estas medidas sería necesaria". "Si es necesario restringir las libertades de todos por culpa de unos pocos irresponsables, pero eso salva vidas de nuestros adultos mayores, tendremos que, solidariamente, renunciar a nuestras libertades", dice.