Pais:   Chile
Región:   Antofagasta
Fecha:   2021-06-18
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   13
Sección:   Opinión - Correo
Centimetraje:   10x9
El Mercurio de Antofagasta
Problema de fondo
La idea de reponer el voto obligatorio en Chile, dada la baja participación de la ciudadanía en las últimas dos elecciones y la aún más baja conexión de los chilenos con lo que pasa en la política nacional, es una trampa que avanza a paso firme luego de que, con 105 votos a favor, el proyecto de ley que busca restablecerlo fuera aprobado en la Cámara de Diputados y pasado al Senado para su correspondiente discusión.

Es una trampa que la propia clase política se impone, porque volver al voto obligatorio es asumir que no están las capacidades para enfrentar el problema real -y de fondo- de esta crisis política e institucional: la incapacidad crónica para conectar con la ciudadanía. Pensar un proyecto de futuro que involucre no parte por analizar si a los chilenos se les obliga a ir a las urnas, no pasa por definir los castigos que se impondrán por no hacerlo.

Construir una visión compartida de futuro pareciera pasar más por hacer un análisis serio y pausado de las brechas, pero también de las tremendas oportunidades que se abren para reconectar a las personas con la política, pero desde el fondo. Mientras la clase política privilegie esa lógica reactiva, seguirá perdiendo oportunidades claras para reconfigurarse. Una alta participación es el mejor mecanismo de defensa de la democracia y la institucionalidad de una nación.
Pie de pagina
-Alejandro Inzunza Socio Symnetics