P: ¿Cuál es la posición de CMP frente al proyecto de Royalty Minero que se discute en el Congreso Nacional?.

R: Como CMP tenemos una posición muy clara respecto del proyecto de royalty minero. Como empresa regional, por nuestra historia local y vocación territorial, compartimos plenamente un punto central del debate que ha generado esta iniciativa, y que dice relación con que los aportes de la minería deben quedar en las regiones y territorios donde están las faenas mineras y sus instalaciones. Como compañía y gente que vive en el entorno de nuestras operaciones queremos contribuir a esta discusión y aportar a una iniciativa que surge del legítimo interés por asegurar mayores recursos para enfrentar la crisis económica provocada por la pandemia y también para abordar las demandas que la ciudadanía ha planteado. Es por ello que nos hemos puesto a disposición para alcanzar acuerdos y encontrar soluciones que permitan mayores recaudaciones, y contribuir al desarrollo económico y social del país, muy especialmente en las regiones de Coquimbo y Atacama en las que tenemos nuestras operaciones y proyectos.

P: En la discusión sobre el proyecto hay sectores que han planteado un escenario marcado por los perjuicios que mayores tributos pueden tener para la industria minera, como paralización de inversiones y menor creación de empleo. Si bien la discusión parlamentaria abordó principalmente al cobre y al litio, ¿cree Ud. que para el hierro también es aplicable este diagnóstico?.

R: La industria del hierro tiene características muy distintas a la del cobre, tanto en Chile y como en el Mundo. Nuestro interés es exponer no sólo nuestro punto de vista particular sino también entregar, con total transparencia y objetividad, todos los casos, datos y cifras que contribuyan a ilustrar sobre la realidad del mercado del hierro, del cual CMP, una empresa chilena y regional, es su principal representante, con más de 70 años de historia en las regiones de Atacama y Coquimbo. Como la industria del hierro es distinta, lo razonable es que no se nos analice con la misma vara que a otros procesos mineros considerando que, entre otros, Chile concentra menos del 0,6% de la producción y comercialización de hierro a nivel mundial y que una parte de esa producción se industrializa en el país. Estas particularidades también se reflejan en los precios de transacción de nuestros metales; mientras una tonelada métrica seca de hierro tiene hoy un valor aproximado de US$ 180 dólares, una tonelada métrica de cátodos de cobre grado A alcanza un valor por sobre los US$ 9.000.

P: ¿Es decir, Uds. consideran que son una industria distinta a la del cobre, lo que justifica un trato diferenciado?.

R: Una diferencia trascendental es que somos parte de una industria que aporta valor agregado al hierro, a través de la integración y el encadenamiento minero-industrial, que va desde la extracción del mineral y producción de pellets en el norte del país, la producción de acero en el sur a través del Complejo Siderúrgico Huachipato y la manufactura de productos finales para su distribución en todo Chile. El grupo al cual pertenecemos, extrae el hierro en las regiones de Coquimbo y Atacama, lo convierte en acero en la del Biobío y elabora productos altamente sofisticados a través de su empresa CINTAC. Es una cadena virtuosa que no existe en otros subsectores mineros y que se compone solo de empresas nacionales. A ella, se suman miles de trabajadores y empresas proveedoras, con una altísima participación de empleados y Pymes provenientes de las mismas zonas en que operamos. Hacemos una minería diferente que materializamos en cada faena y en cada uno de nuestros procesos, porque queremos que esa energía no solo nos cohesione como un equipo conectado y alineado, sino que también nos impulse a seguir trabajando para crecer de manera sostenible con todo nuestro entorno.

P: ¿Qué diferencias tienen en CMP con el proyecto hoy se tramita en el Congreso?.

R: Creemos que la tramitación de la iniciativa en el Senado es una oportunidad para enriquecer y mejorar el proyecto de royalty. Entendemos que, al final de su aprobación en la Cámara de Diputadas y Diputados, se incorporó la extensión a sustancias concesibles, pero todo el análisis se realizó principalmente en base al cobre y el litio, realidad muy distinta a la del hierro. Considerando que el proyecto aprobado en la Cámara tomó como referencia solo el valor del cobre para su elaboración, es importante destacar que la industria del hierro tiene un modelo de negocios muy diferente, esto porque los fundamentos de la industria del hierro se basan en extracción minera, transporte de altos volúmenes y logística de procesos, encadenando a nivel nacional -en el caso del Grupo CAP- los siguientes eslabones de agregación de valor hasta llegar incluso a productos finales, todo ello sustentado en precios de mercado muy inferiores que los registrados en otros minerales. Por estos y otros antecedentes, creemos que se justifica plenamente que la tramitación de esta iniciativa parlamentaria de cuenta de estas particularidades y diferencias.

P: El proyecto de Ley de Royalty propone que parte de los recursos se queden en las zonas de producción minera. ¿En CMP estarían de acuerdo con esta idea?.

R: La minería del hierro es chilena. Todo queda acá. Nuestra gente vive en los mismos lugares donde están nuestras faenas e instalaciones: Coquimbo, La Serena, La Higuera, Vallenar, Huasco, Freirina, Caldera, Copiapó y Tierra Amarilla. Somos de las regiones de Atacama y Coquimbo. El 98% de nuestros ejecutivos, trabajadores y colaboradores vive en el Norte Chico de Chile. Somos vecinos orgullosos de liderar cadenas de valor sólidas y con arraigo profundo en cada zona, incluyendo a proveedores Pymes a quienes damos preferencia, en lugar de comprar todo de manera centralizada. Nuestro programa de compras locales significa inyectar US$250 millones que quedan anualmente en la economía y hogares de las regiones de Atacama y Coquimbo. También somos buenos socios de negocios, prueba de lo cual en 2020 obtuvimos el reconocimiento como la mejor empresa pagadora del país, al ser la compañía con los menores plazos para cumplir con sus proveedores, en un ranking hecho por la Bolsa de Productos y la Asociación de Emprendedores de Chile (ASECH) y que incluía a todo tipo de empresas, reconocimiento que nos honra y anima a seguir mejorando.

P: ¿Qué rol ve Ud. para la minería en un país con tantas y crecientes demandas sociales?.

R: El papel de la minería en un contexto de crecientes demandas sociales es jugar un rol que acompañe este desarrollo desde la conexión de sus procesos centrales con su territorio, de manera sustentable. Es decir, aportar a las comunidades cercanas en su crecimiento, entendido esto de manera integral, como por ejemplo educación, empleo local, servicios, cuidado ambiental, diversidad, inclusión, etc. La minería diferente que nos inspira como CMP se sustenta en trasformar el potencial y capacidades de las personas en acciones concretas en beneficio del territorio y la gente que en él convive. Estamos convencidos de que ese es el camino para proyectar juntos un desarrollo sostenible. Contribuciones de CMP en esta línea son haber sido pioneros en desalinización y uso de energías renovables, liderar uno de los proyectos de economía circular minera más grandes del Mundo a través del reprocesamiento de relaves en nuestra Planta Magnetita y ser referentes en la zona en materia de desarrollo de proveedores locales, entre otros ejemplos, que evidencian nuestra inserción en la vida cotidiana de las comunidades de las cuales somos parte. Sabemos que aún nos queda mucho por ajustar y mejorar, pero estamos convencidos que esta es el camino: el de una minería regional, sustentable e integrada con el territorio y su gente.

P: ¿Cuál es la visión que tienen desde CMP del proceso constituyente, en relación a la actividad minera?.

R: Los procesos democráticos que lleva adelante el país y emanados de mecanismos formales de nuestras instituciones, son muy buenas oportunidades para ir construyendo un mundo y un país mejor para todos y todas. Hoy estamos con la mirada puesta en el futuro, un futuro mejor para los territorios y su gente, un futuro de más desarrollo para nuestra empresa y sus comunidades, un futuro que nos permite construir una minería diferente, un futuro que nos permitirá aprovechar todo el potencial y las oportunidades de crecimiento que tienen CMP, su equipo de trabajo y los territorios que acogen sus operaciones y proyectos.