Luego de meses de trabajo, las asociaciones de regantes de la primera sección del río Maipo y Aguas Andinas firmaron ayer un histórico acuerdo, que establece una serie de medidas que buscan ser las primeras para sentar las bases de una solución que refuerce el suministro de agua a la población. A la vez, que permita sostener la industria agroalimentaria, mejorando la eficiencia hídrica de la cuenca, señaló la firma sanitaria.

Este acuerdo llega en medio de una larga sequía que afecta al país y en un año que ha sido catalogado como extraordinariamente seco. Esto incluye nuevas inversiones por parte de Aguas Andinas, una mejora a la actual infraestructura a partir de un diagnóstico cooperativo y profesional de largo plazo, la reutilización del recurso con aguas depuradas de las biofactorías y un plan maestro de gestión más eficiente, de manera que las soluciones futuras provengan de distintos sectores.

Se suma la construcción de pozos profundos sobre el acuífero bajo la Región Metropolitana y piscinas de infiltración para recargarlos en las épocas excedentarias. Todo ello permitirá contar con más recursos hídricos adicionales, indicó la compañía.

La reutilización de aguas depuradas en las biofactorías involucra 'una segunda vida al recurso', dice Aguas Andinas. Añade que gracias al proceso de tratamiento y limpieza de estas se podrían utilizar directamente en actividades agroalimentarias, industrias y riego de grandes áreas verdes. Ello permitiría contar con mayor disponibilidad de agua cruda superficial para potabilizarla y distribuirla a la población.