El liderazgo femenino es una realidad cada vez más indiscutible dentro de Southbridge, que continúa dando pruebas contundentes del compromiso que asumió con la equidad de género y el desarrollo profesional de sus colaboradoras.

A la meta de contar con un 50% de paridad en su dotación para fines de 2024 -y que a la fecha ya va en un 45%- se suma la consolidación del programa 'EmpowerHer'. Esta iniciativa, en colaboración con startups y socios expertos en equidad y propósito, entrega todas las herramientas necesarias para que cada mujer alcance el desarrollo que busca en todos los ámbitos de su vida.

Hoy la compañía suma otro importante logro: en julio pasado comenzó el programa de Mentorías con un primer grupo de 16 profesionales que tiene como mentores al Comité Ejecutivo de Southbridge liderado por su presidente, Fabiana De Nicoló.

Cada director es mentor directo de dos colaboradoras guiadas, creando un ambiente de aprendizaje enriquecedor y personalizado que beneficia a ambos con un mayor conocimiento y crecimiento conjunto.

'En un momento donde la cantidad de información a la que tenemos acceso es tanta, el aprendizaje desde las experiencias es mucho más valioso para entender cómo esa persona que hoy tiene una posición de liderazgo forjó su camino', sostiene De Nicoló.

María Zuleta, ejecutiva de call center, es parte de esta primera versión y se inscribió por la oportunidad de perfeccionamiento, pero también para conocer en mayor profundidad el negocio. 'Me ha enseñado a enfocarme en el paso a paso para llegar hacia donde quiero estar. Escuchar la experiencia de un líder en primera persona ha sido un gran aprendizaje que valoro muchísimo', sostiene la profesional.

Southbridge es la primera aseguradora en Chile y Latam en certificarse corno Empresa B, buscando transformar la industria a través de una estrategia de sostenibilidad con foco en la equidad, diversidad e inclusión. Este año lanzó su nueva política de equidad salarial que eliminó por completo la brecha de remuneración entre hombres y mujeres: hoy todos, sin distinción de género, reciben el mismo sueldo por las mismas funciones.

En cuanto a atracción del talento, cada terna está integrada por candidatos de ambos géneros, una política que permite que áreas como tecnología e innovación -donde los roles son tradicionalmente ocupados por hombres- cuenten con liderazgos femeninos.