Pais: Chile
|
Región: Metropolitana de Santiago
|
Fecha: 2025-03-10
|
Tipo: Prensa Escrita
|
Página(s): 17
|
Sección: Nacional
|
Centimetraje: 27x27
|
Pie de Imagen
Durante la última semana se registraron 314 contagios y siete muertes probables o sospechosas por el virus.
El Covid-19, cinco años después
A un lustro de la aparición del mortal virus la ciencia ha derribado varios mitos, como la supuesta relación entre el tipo de sangre y la gravedad del contagio, o la idea de que el virus no sobrevivía a altas temperaturas.
En diciembre de 2019, un paciente en Wuhan, China, fue hospitalizado con síntomas que no coincidían con ninguna enfermedad conocida. Pronto, su caso sería identificado como Covid-19 y se volvería una preocupación mundial.
El 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia por este nuevo virus, solo unos días después de que su llegada fuera confirmada en Chile.
Con poca información y sin vacunas, la incertidumbre dominó los primeros meses, mientras confinamientos y cuarentenas transformaban la vida cotidiana.
Han pasado cinco años, tiempo en que la ciencia ha logrado responder muchas de las incógnitas iniciales.
Una de las primeras teorías que circulaban sostenía que el virus no sobrevivía a temperaturas superiores a los 25°C, lo que hacía suponer que tardaría en llegar a nuestro país, ya que en marzo aún predominan temperaturas altas. Con el tiempo, esto demostró ser falso y que el contagio ocurre independiente de la temperatura.
Otra especulación que surgió de un grupo de científicos chinos decía que la posibilidad de contagio y la reacción al virus podrían estar fuertemente relacionadas con el tipo de sangre del afectado, sugiriendo que las personas con sangre tipo A tendrían mayor riesgo, mientras que las de tipo O serían menos vulnerables. Sin embargo, el tiempo se encargó de refutar esta teoría.
'La relación con los grupos sanguíneos no se pudo demostrar. En cambio, se evidenció que la relación estaba específicamente con aquellos que tenían comorbilidades, como enfermedades hormonales crónicas o algún grado de inmunosupresión u otro tipo de enfermedades, quienes eran los que más se veían afectados', aclara Mauricio Canals, académico de la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile.
El experto afirma que ya se han derribado casi todos los mitos: 'Se aprendió a conocer la enfermedad. Al principio no se tenía un adecuado conocimiento de cómo se podría manejar la pandemia, cuál era la transmisión, la capacidad de transmisión de este virus, cómo se podía controlar, cuánto podíamos predecir una pandemia, cuáles eran las intervenciones más adecuadas'.
Agrega que en estos últimos años se han respondido varias de esas incógnitas: 'Hay un gran avance, porque pudimos conocer, por ejemplo, que la capacidad de predicción durante una pandemia no es más de 15 días. Aprendimos que, antes de la vacuna, es posible manejar una pandemia con intervenciones como la cuarentena. Se aprendió mucho, lo que permite que en el futuro podamos estar más preparados en caso de que surja otra pandemia'.
Una de las principales certezas científicas es que la severidad de la infección causada por este virus es prevenible mediante la vacunación. En tiempo real se ha comprobado que la vacuna, que se logró un año después de la aparición del virus, es la más eficaz para controlar la enfermedad.
A las 11.41 del 24 de diciembre de 2020 se inoculó a la primera persona en Chile contra el Covid-19. Así comenzó una campaña de inmunización que ya ha administrado más de 62 millones de dosis entre esquemas básico y de refuerzo. Estrategia que continúa; de hecho, el pasado sábado se dio inicio al proceso anual para los grupos objetivos, entre los que están el personal de salud de establecimientos, las gestantes, las personas inmunosuprimidas y los adultos de 60 años o más.
'Observamos que las muertes y casos severos de enfermedad por Covid-19 fueron reduciéndose a medida que se fue incrementando la tasa de vacunación en el país, así como en otros países. También generamos la evidencia de seguridad e inmunogenicidad necesaria para permitir la aprobación de la vacuna inactivada en población pediátrica, que también permitió controlar casos de enfermedad severa en esa población', señala Alexis Kalergis, director de IMII y académico UC.
De hecho, la investigación respecto al impacto de la campaña de vacunación en Chile (Direct impact of Covid-19 vaccination in Chile), a cargo de investigadores del Centro de Modelamiento Matemático (CMM) y el doctor Mauricio Canals, observó una importante mitigación de la enfermedad gracias a las campañas de inoculación.
El estudio estimó que durante las campañas de 2021 y 2022 la vacunación evitó 1.030.648 contagios, 268.784 hospitalizaciones, 85.830 ingresos a unidades de cuidados intensivos (UCI) y 75.968 muertes relacionadas con el Covid-19 en personas de 16 años o más.
Desde que aterrizó el primer caso de Covid-19 en Chile han pasado 1.831 días y los contagios ya no son miles, las mascarillas no son obligatorias y la red asistencial no esta presionada por pacientes que requieren cuidados intensivos producto del virus.
De acuerdo con el registro del Ministerio de Salud, actualmente hay 88 pacientes covid-19 internados en alguna unidad. De estos, 78 se encuentran en el sistema público y 10 en el privado. En cuanto a la distribución por tipo de cama, 13 pacientes están en UCI, 12 en UTI , 48 en camas medias y 15 en camas básicas.
Durante la última semana se registraron 314 contagios y siete muertes probables o sospechosas por el virus.
Nex Prensa Escrita
El Covid-19, cinco años después
A un lustro de la aparición del mortal virus la ciencia ha derribado varios mitos, como la supuesta relación entre el tipo de sangre y la gravedad del contagio, o la idea de que el virus no sobrevivía a altas temperaturas.
En diciembre de 2019, un paciente en Wuhan, China, fue hospitalizado con síntomas que no coincidían con ninguna enfermedad conocida. Pronto, su caso sería identificado como Covid-19 y se volvería una preocupación mundial.
El 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia por este nuevo virus, solo unos días después de que su llegada fuera confirmada en Chile.
Con poca información y sin vacunas, la incertidumbre dominó los primeros meses, mientras confinamientos y cuarentenas transformaban la vida cotidiana.
Han pasado cinco años, tiempo en que la ciencia ha logrado responder muchas de las incógnitas iniciales.
Una de las primeras teorías que circulaban sostenía que el virus no sobrevivía a temperaturas superiores a los 25°C, lo que hacía suponer que tardaría en llegar a nuestro país, ya que en marzo aún predominan temperaturas altas. Con el tiempo, esto demostró ser falso y que el contagio ocurre independiente de la temperatura.
Otra especulación que surgió de un grupo de científicos chinos decía que la posibilidad de contagio y la reacción al virus podrían estar fuertemente relacionadas con el tipo de sangre del afectado, sugiriendo que las personas con sangre tipo A tendrían mayor riesgo, mientras que las de tipo O serían menos vulnerables. Sin embargo, el tiempo se encargó de refutar esta teoría.
'La relación con los grupos sanguíneos no se pudo demostrar. En cambio, se evidenció que la relación estaba específicamente con aquellos que tenían comorbilidades, como enfermedades hormonales crónicas o algún grado de inmunosupresión u otro tipo de enfermedades, quienes eran los que más se veían afectados', aclara Mauricio Canals, académico de la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile.
El experto afirma que ya se han derribado casi todos los mitos: 'Se aprendió a conocer la enfermedad. Al principio no se tenía un adecuado conocimiento de cómo se podría manejar la pandemia, cuál era la transmisión, la capacidad de transmisión de este virus, cómo se podía controlar, cuánto podíamos predecir una pandemia, cuáles eran las intervenciones más adecuadas'.
Agrega que en estos últimos años se han respondido varias de esas incógnitas: 'Hay un gran avance, porque pudimos conocer, por ejemplo, que la capacidad de predicción durante una pandemia no es más de 15 días. Aprendimos que, antes de la vacuna, es posible manejar una pandemia con intervenciones como la cuarentena. Se aprendió mucho, lo que permite que en el futuro podamos estar más preparados en caso de que surja otra pandemia'.
Una de las principales certezas científicas es que la severidad de la infección causada por este virus es prevenible mediante la vacunación. En tiempo real se ha comprobado que la vacuna, que se logró un año después de la aparición del virus, es la más eficaz para controlar la enfermedad.
A las 11.41 del 24 de diciembre de 2020 se inoculó a la primera persona en Chile contra el Covid-19. Así comenzó una campaña de inmunización que ya ha administrado más de 62 millones de dosis entre esquemas básico y de refuerzo. Estrategia que continúa; de hecho, el pasado sábado se dio inicio al proceso anual para los grupos objetivos, entre los que están el personal de salud de establecimientos, las gestantes, las personas inmunosuprimidas y los adultos de 60 años o más.
'Observamos que las muertes y casos severos de enfermedad por Covid-19 fueron reduciéndose a medida que se fue incrementando la tasa de vacunación en el país, así como en otros países. También generamos la evidencia de seguridad e inmunogenicidad necesaria para permitir la aprobación de la vacuna inactivada en población pediátrica, que también permitió controlar casos de enfermedad severa en esa población', señala Alexis Kalergis, director de IMII y académico UC.
De hecho, la investigación respecto al impacto de la campaña de vacunación en Chile (Direct impact of Covid-19 vaccination in Chile), a cargo de investigadores del Centro de Modelamiento Matemático (CMM) y el doctor Mauricio Canals, observó una importante mitigación de la enfermedad gracias a las campañas de inoculación.
El estudio estimó que durante las campañas de 2021 y 2022 la vacunación evitó 1.030.648 contagios, 268.784 hospitalizaciones, 85.830 ingresos a unidades de cuidados intensivos (UCI) y 75.968 muertes relacionadas con el Covid-19 en personas de 16 años o más.
Desde que aterrizó el primer caso de Covid-19 en Chile han pasado 1.831 días y los contagios ya no son miles, las mascarillas no son obligatorias y la red asistencial no esta presionada por pacientes que requieren cuidados intensivos producto del virus.
De acuerdo con el registro del Ministerio de Salud, actualmente hay 88 pacientes covid-19 internados en alguna unidad. De estos, 78 se encuentran en el sistema público y 10 en el privado. En cuanto a la distribución por tipo de cama, 13 pacientes están en UCI, 12 en UTI , 48 en camas medias y 15 en camas básicas.
Durante la última semana se registraron 314 contagios y siete muertes probables o sospechosas por el virus.
Pais: Chile
|
Región: Metropolitana de Santiago
|
Fecha: 2025-03-10
|
Tipo: Prensa Escrita
|
Página(s): 17
|
Sección: Nacional
|
Centimetraje: 27x27
|