La aceleración de la transformación digital potenciada por la pandemia recalcó la importancia de la tecnología para contar con ciudades más eficientes, sostenibles e inteligentes.

'La masificación del teletrabajo, telemedicina y los trámites y educación en línea tendrá efectos permanentes e impactará el funcionamiento de las ciudades', dice Eduardo Bitran, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la U. Adolfo Ibáñez.

A su juicio, es fundamental para un país como Chile avanzar en la senda de desarrollar 'ciudades inteligentes', por sus impactos positivos en 'movilidad, seguridad, amigabilidad hacia el visitante, eficiencia energética e hídrica, salud, disminución de tiempos muertos y manejo eficiente de los desechos'. Para ello, agrega, es necesario definir estrategias desde la gobernanza para la modernización digital del Estado y de las urbes.

Comienzan a ser una realidad

Pero, ¿qué es una ciudad inteligente? Solange Arredondo, presidenta de Do! Smart City, lo explica: 'Son las ciudades que usan el potencial de la tecnología y toman en cuenta las características de sus territorios para mejoran la calidad de vida de sus habitantes. Conjugan tres elementos centrales: los ciudadanos, las personas que habitan las ciudades; la tecnología, que impulsa y facilita la resolución de problemas que ocurren en las urbes, y la visibilidad de las características de ese territorio'.

Do! Smart City es una iniciativa privada que nació en 2016 para impulsar este concepto en Chile. 'Hace seis años, el término smart city era poco conocido. Cuando partimos nos propusimos expandir este concepto y dar a conocer las oportunidades que se podían desarrollar', dice Arredondo. Cuentan con varias actividades en este sentido, como los webinars 'Municipios del futuro' y el plan de capacitación 'Empresas para la ciudad'. Este último apoya a pymes a incursionar en esta industria: 'Les entregamos conocimiento, pero, sobre todo, visibilización para que puedan desarrollarse comercialmente'.

Por su parte, Ana Julia, gerenta del Hub Smart Araucanía, afirma que 'las ciudades chilenas requieren tener un desarrollo sostenible, gestionando sus recursos de manera más eficiente, donde los ciudadanos y sus autoridades actúen de forma colaborativa, con una planificación urbana que considere la integración tecnológica, pero que a la vez respete el medioambiente. Esto se debe realizar haciendo uso de las tecnologías, proporcionando datos abiertos que posibiliten la mejora y desarrollo de nuevos servicios'.

Este proyecto (financiado por el BID, Corfo y Gore de La Araucanía, y desarrollado por U. de La Frontera con Incubatec UFRO), busca resolver problemas urbanos por medio de soluciones tecnológicas, para lo cual están potenciando actualmente a 75 nuevos emprendimientos. 'Hoy disponemos de soluciones impulsadas por emprendedores que ofrecen alternativas para levantar y analizar la información relevante de la ciudad en áreas como participación ciudadana, economía, transporte, seguridad y salud, medioambiente, educación y gobierno', asevera Julia.

Otra iniciativa que está apoyando a los innovadores es Sé Santiago Ciudad Inteligente, programa de Corfo Metropolitano y Fundación País Digital. Hoy potencia a cerca de 50 emprendimientos con la meta de que Santiago sea la ciudad más inteligente de América Latina y un referente mundial en innovación, sostenibilidad y competitividad.

El programa cuenta con el respaldo de organismos públicos, empresas y organizaciones de la sociedad civil y tiene sus focos puestos en movilidad, seguridad, medio ambiente y recursos habilitantes para la ciudad, siempre con uso de tecnología. Su gerenta, Luz María García, afirma: 'Hoy hay distintos elementos que nos permiten decir que estamos en una ruta más cierta de llegar a ser una ciudad inteligente. A partir de la pandemia hubo un cambio de concepción acerca de cómo podemos llevar la digitalización hacia los territorios a partir de los gobiernos locales, de los municipios y esos actores ahora son cruciales para poder desplegar esta visión de manera concreta en Chile'.