Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2021-10-07
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   D3
Sección:   Innovación - Emprendedores
Centimetraje:   27x28

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La firma está presente hoy en Chile, EE.UU., México y Perú y factura US$ 7 millones al año.

Cristóbal Rivas, cofundador y CEO de WiseConn
El Mercurio
Su tecnología permite optimizar el uso de agua en hasta 40%
Los planes de WiseConn, la startup de riego inteligente que conquistó California: “Ahora vamos por el mundo”
Surgieron en 2006 y desde hace cinco años han sido capaces de tecnificar los valles de la costa oeste estadounidense , derrotando a la competencia de Silicon Valley. Ahora, esperan levantar US$ 10 millones para consolidarse como la mayor compañía del planeta en su rubro.
Que una empresa chilena ofrezca un producto más valorado que los generados por Silicon Valley ya es meritorio. Pero que les gane jugando de visita, en plena California, es toda una hazaña. Y eso es justamente lo que ha logrado WiseConn, una startup chilena de riego inteligente fundada en 2006 por Cristóbal Rivas, Guillermo Valenzuela, Luis Felipe Escobar y José Ulloa.

Rivas, CEO de la empresa, cuenta que la historia comenzó cuando el equipo se propuso usar tecnología para reducir el impacto ecológico de la industria agrícola. 'Encontramos una tremenda brecha entre lo que era posible y lo que efectivamente se estaba utilizado. Nos propusimos usar la tecnología de manera práctica y cercana a las necesidades de los agricultores', cuenta.

WiseConn desarrolló así un sistema que conecta los campos a la nube y permite a los agricultores programar el riego a distancia, a partir de datos específicos de lo que ocurre en el terreno.

La tecnología rápidamente ganó terreno en Chile, de la mano de un enfoque que ha sido clave para su éxito. 'Muchas empresas pretenden llegar a todos los agricultores de manera directa, pero eso no es practicable pues son muchos y con necesidades muy diversas. Por eso existen redes de empresas locales que prestan los servicios en quienes los agricultores ya confían', explica Rivas. Es decir, sus clientes no son los agricultores, sino las empresas de riego. Esta forma de operar les permite ser una empresa liviana y, a la vez, mantener una amplia cobertura de servicio al usuario final.

Ya con el mercado local bajo control, hace cinco años WiseConn apuntó a California, un mercado prometedor tanto por su tamaño como por estar sorprendentemente poco tecnificado.

'El agro en Chile es más avanzado que el de California en términos tecnológicos', dice el CEO. Pese a ser la cuna de Silicon Valley, dicho estado tuvo en la migración mexicana una fuente de mano de obra barata que desincentivó la automatización. Pero los mayores controles migratorios y la escasez hídrica están cambiando el panorama. Y WiseConn promete ahorros de hasta 40% de agua en el riego.

Tras cinco años de operación, la empresa ya es líder en California y desde ahí se ha expandido a un total de 12 estados de EE.UU., donde gestiona el riego de dos mil campos. La operación allá tiene 15 personas, que se suman a las 52 que trabajan desde Chile. También están presentes en México y Perú.

Esta aventura los ha fogueado. Cuando iniciaron su plan salieron a levantar capital en Chile y fue una experiencia que califican de 'difícil': 'Encontramos desconfianza en que se pudiera hacer tecnología de impacto desde Chile'. Muchos no creían que unos chilenos pudieran conquistar un mercado en las narices de Silicon Valley.

Y, de hecho, el WiseConn ha lidiado permanentemente con tecnológicas californianas, con grandes espaldas financieras, que amenazan con disputarles el mercado. Sin embargo, los chilenos se han impuesto. 'Ha habido muchos intentos de empresas de Silicon Valley por entrar al agro pero tienen una parada que choca con la agricultura. Llegan donde los agricultores y los miran hacia abajo, como si no supieran hacer su trabajo y ellos les trajeran la receta. Además, los tiempos de los inversionistas de tecnología no son compatibles con los largos ciclos agrícolas, donde hay que ganarse la confianza de quienes tienen todo invertido en el campo. Este negocio no es tan rápido, hay que crecer temporada tras temporada', reflexiona Rivas.

Ahora, como líder en Chile y California, la ambición de WiseConn crece. 'Ahora vamos por el mundo y eso implica mirar hacia Europa, Brasil y Australia. Ya estamos trabajando en expandirnos a Europa con nuestros recursos, pero estamos buscando otra ronda de capital de US$ 10 millones para consolidarnos como la empresa más grande de tecnología para riego del mundo', dice el CEO.

¿Cuál es la motivación de esta arremetida? Rivas lo resume así: 'Los negocios de tecnología solo son rentables si la escala es enorme. Hay que pensar en grande'.
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Manuel Fernández B.-