En el marco del mes del cáncer de mama ha quedado en evidencia la notable disminución de mamografías, situación generada por la pandemia y el temor a acudir hasta centros de salud para realizar el tan necesario chequeo, lo que ha encendido las alertas de los expertos.

Hoy, en un año más alentador en cuanto a las cifras de contagios por COVID-19, los especialistas han iniciado un potente llamado: se deben retomar los exámenes, como también incentivar el auto chequeo.

En este sentido, el doctor Ignacio de La Torre, ginecólogo de la Clínica Ciudad del Mar entregó recomendaciones en la materia, como también, cifras claves para entender el panorama.

"De acuerdo a cifras oficiales, las mamografías han disminuido cerca de un 61% en la pandemia y esto ha determinado una disminución cercana al 50% de las notificaciones GES de cáncer de mama. La sospecha de cáncer de mama bajó a menos de la mitad el 2020, en comparación a 2017, 2018 y 2019", indicó el médico.

Palabras que corrobora el estudio en la materia del Ministerio de Salud, realizado en el 2017, el que deja en evidencia que en Chile los números en torno a esta patología son alarmantes: cada año se diagnostican alrededor de 4.200 nuevos casos y mueren aproximadamente 1.500 mujeres.

DIAGNÓSTICO PRECOZ

Bajo este panorama, el también presidente del Colegio Médico de Valparaíso apuntó a la importancia de un diagnóstico precoz. Mensaje dirigido, principalmente, a las mujeres mayores de 40 años.

"Con respecto a la región, tenemos la importante misión de mejorar el diagnóstico precoz, esto es, el diagnóstico de cáncer de mama cuando la lesión aún no es palpable y esto se hace mediante la mamografía. Por eso es tan importante potenciar el mensaje a la mujer mayor de 40 años, que debe realizarse la mamografía una vez al año. Este examen se debe hacer desde los 40 años en adelante, y si las mujeres tienen factores de riesgo, como haber tenido familiares directos con esta enfermedad, pueden iniciar estos exámenes preventivos antes", señaló.

Según los datos entregados por el especialista, la evidencia científica indica que si se hace una mamografía anual desde los 40 años la mortalidad por cáncer de mama puede reducirse en un 25%, además el diagnosticar el cáncer de mama en etapas tempranas, "permitiendo tratamientos menos agresivos, menos mutilantes, con mayor calidad de vida, menos secuelas funcionales y psicológicas".

A lo que recalcó que, "la importancia radical de chequearse constantemente es precisamente que la mamografía permite detectar cánceres de mama de 2 a 4 años antes de que estos sean palpables, es decir, 2 a 4 años antes de que el autoexamen mamario los detecte y por eso es tan importante, porque detecta cánceres muy pequeñitos cuyo tratamiento es menos agresivo y con una mejor sobrevida".