Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2021-12-20
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   19
Sección:   Columna de Opinión
Centimetraje:   26x20
Electricidad
La verdadera descarbonización del sector eléctrico
LA CRISIS CLIMÁTICA es el problema que define nuestra era. Por tanto, la pregunta que debe estar en la mente de los sectores productivos del país, instituciones y otras autoridades es la siguiente: ¿Cómo y cuándo llegamos a un Chile 100% renovable? Idealmente cuanto antes, para reducir los contaminantes globales y locales, asegurándonos de no perder la mirada los efectos sociales y ambientales que esto pueda tener. La electricidad representa solo 22% de la energía que consumimos; lo que debemos descarbonizar es toda la matriz energética que incluye procesos industriales, transporte y calefacción, por lo que es clave electrificar la mayor parte de estos sectores y procesos.

Descarbonizar no significa solo retirar el carbón de la matriz eléctrica. Supone sacar todos los combustibles fósiles de la matriz energética, por lo que el gas y el diésel son parte importante de esta tarea. Para lo que se pueda electrificar, debemos pensar en hidrógeno verde. Si ya tenemos claro el itinerario que debemos seguir, solo nos falta tener clara la lista de condiciones habilitantes que necesita el país para llegar a esto. El estudio de trayectoria 100% renovable de Acera, busca poner información sobre la mesa para dar al sector una herramienta para definir una hoja de ruta. Los análisis consistieron en estudiar las condiciones habilitantes para distintas trayectorias de descarbonización de la matriz eléctrica. Una de las trayectorias factibles es el retiro progresivo de las centrales a carbón en una fecha entre en torno a 2030 y las centrales a gas y diésel en el periodo 2035-2040.

Teniendo en cuenta que en los próximos años ya hay un portafolio de proyectos comprometidos por unos 10 GW de capacidad renovable (que son los que están en desarrollo y construcción), el estudio concluye que dicha capacidad no es suficiente para el retiro total de las centrales a carbón y, por lo tanto, es necesario dar un impulso aún más fuerte al sector. Si se pretende retirar las centrales a carbón hacia el 2030, a estos 10 GW hay que agregar aproximadamente 5 GW de renovables entre 2021 y el 2025 (1 GW de los cuales debe ser almacenamiento BESS) y otros 7,5 GW del 2026 a 2030 (casi 2 GW de los cuales debería ser almacenamiento de mas largo plazo como bombeo o CSP). La incorporación de tecnologías de almacenamiento va a requerir mayores incentivos para atraer los volúmenes necesarios de inversión de privados.

Queda también claro que la generación hidroeléctrica deberá balancear la variabilidad diaria de la generación eólica y FV (lo cual requiere poner atención a posibles conflictos con otros usos del agua). La importancia del gas también se debe mencionar, pero siempre como combustible de transición, que no desplace renovables, que sea flexible y que tenga fecha de salida para seguir trabajando en las condiciones habilitantes para tener una matriz energética 100% renovable. No hace falta ser tan futurista como el 'Proyecto Antípodas' para descarbonizar. Se necesita una mirada práctica y tener claro a la hora de regular, cuáles son los puntos pendientes.

Recuadro
La electricidad representa solo 22% de la energía que consumimos; lo que debemos descarbonizar es toda la matriz energética que incluye procesos industriales, transporte y calefacción.
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Por Patricia Darez, vicepresidenta de Acera A.G.-