¿Ha invertido alguna vez en criptomonedas? Si es uno de los miles de interesados en esta tecnología de inversión que, sin dudas, nos ha llevado a realizar un gran ajuste en nuestros sistemas financieros, permítanos decirle que el escepticismo está en alza en torno a ella, según los expertos, por la poca transparencia, seguridad y eficiencia que la rodea.

Peor aún, se convirtió este último tiempo en una mina de oro para los cibercriminales. Para graficar esta última aseveración, diversos estudios indican que las criptomonedas están siendo utilizadas por la delincuencia virtual, que el año pasado movió cerca de US$ 14 mil millones entre robos y fraudes en todo el mundo. Un 79% más que el 2020, en que se registraron US$ 7 mil 800 millones. Pero ¿cómo operan estas bandas para lograr concretar los ilícitos?

'Los ciberdelincuentes saben muy bien cómo controlar los block-chain; es decir, el registro de transacciones y criptoactivos, logrando realizar ilícitos como el criptojacking, que es el secuestro de un dispositivo electrónico sin la autorización del usuario para así valerse de sus recursos en el minado de criptomonedas. También existe manipulación de los valores en la bolsa, estafas piramidales, el uso de Ransomware y transacciones ilegales que no dejan rastro alguno; en otras palabras, un arsenal inmenso de posibilidades de las cuales se vale el cibercrimen', responde el director de Operaciones de CronUp, Germán Fernández.

Formas de estafa

Entre otras múltiples formas de estafa conocidas actualmente, o fake coins, se incluyen:
*El webcoin, en donde los ciberdelincuentes simulan páginas web de servicios de compra y venta de criptomonedas.

* El appcoin, que son aplicaciones creadas por estafadores para suplantar las carteras de inversión real o, en otros casos, aplicaciones que parecen ser carteras de inversión en criptomonedas, pero que solo buscan obtener los datos bancarios de la víctima.

* El celebricoin, que es un anuncio que utiliza la imagen de algún famoso como anzuelo para que acceda a un servicio fraudulento o dé sus datos bancarios.

Y como suele pasar en este tipo de operaciones, quien resulta ser el eslabón más débil para que se materialicen estos ciberdelitos, generalmente, es el propio usuario. O sea, fácilmente podría ser usted la próxima víctima.
'Es el individuo el responsable de averiguar bien en qué plataforma se está invirtiendo, pues un gran número de inversores cree que estas son supervisadas por organismos monetarios oficiales. Y esto es relevante, pues al no haber una regulación sobre los prestadores de servicios de criptomonedas, se facilita mucho más el accionar del cibercrimen', nos aseveró el experto.


Consideraciones

Por esto se hace esencial que, en este tipo de inversiones digitales, tanto usuarios como empresas y diversas organizaciones, sigan recomendaciones básicas como:

* Verificar el dominio: Siempre es bueno revisar en internet si aparecen advertencias sobre la página en que se quiere invertir, o el tipo de criptomoneda que ofrece.

* Desconfiar: Ya sea por e-mail, SMS u otro medio, los ciberestafadores suelen prometer ganancias excesivas en poco tiempo. En el mundo de las monedas digitales, muy pocas veces ocurre tal escenario.

* Poner ojo con los perfiles falsos: Las redes sociales están pobladas de anuncios con supuestos expertos en inversión de criptomonedas, ofreciendo resultados realmente de fantasía. Muchas veces son ciberdelincuentes usurpando la identidad de otra persona o empresa.

* Proteja su billetera virtual: Existen diferentes fórmulas para proteger esa información. En lo posible, use la mayor cantidad de capas de seguridad.

* No pague por adelantado: Por ningún motivo considere una 'oportunidad' de inversión aquella que le exija un pago por adelantado, o que signifique facilitar el acceso a sus claves para ingresar a su billetera virtual.