Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2022-11-06
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   D4
Sección:   Reportajes
Centimetraje:   55x27

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- El miércoles por la noche, el Presidente anunció la reforma previsional en cadena nacional.
El Mercurio
MODIFICACIÓN AL SISTEMA DE PENSIONES:
Las claves políticas de la reforma que marca el inicio del segundo tiempo para La Moneda
Aunque fuera del plazo que inicialmente tenían presupuestado, la noche del miércoles se puso fin a la espera: el Presidente anunció su reforma previsional, que elimina las administradoras privadas de los fondos. 'No tenemos derecho a seguir haciéndolos esperar', dijo. Fue la primera jugada del plan de relanzamiento del Gobierno, en un complejo momento, aún marcado por la derrota del 4-S.
1 Un nuevo comienzo

El despliegue mediático fue la primera arremetida. Terminado el anuncio del Presidente Gabriel Boric en cadena nacional, que duró 15 minutos y 30 segundos, tres de sus ministros del comité político —Mario Marcel (Hacienda), Jeannette Jara (Trabajo) y Camila Vallejo (Segegob)— aparecieron, simultáneamente, en distintos noticieros nacionales, para reforzar el discurso del mandatario y explicar 'con peras y manzanas' la tan esperada reforma previsional.

Mientras eso ocurría, el resto del gabinete, los subsecretarios, presidentes de partidos y parlamentarios oficialistas destacaban, con bombos y platillos, la propuesta a través de sus redes sociales.

Y como si lo anterior hubiese sido poco, la ministra de la Segpres, Ana Lya Uriarte, al día siguiente se tomó las radios y canales de televisión para referirse a la reforma que, en los próximos días, ella misma ingresará en la Cámara de Diputados.

¿Qué buscaba el Gobierno con ese contundente despliegue? Con varios meses sin tener el control de la agenda política, La Moneda se fijó una meta clara: el anuncio debía marcar un punto de inflexión que le permitiera, en medio de las turbulencias, retomar el vuelo con algo más de calma.

Tanto así, que incluso la Secom ordenó a los secretarios de Estado descartar cualquier aparición pública durante esta semana, salvo a aquellos ministros que tuviesen directa relación con la reforma.

La idea detrás, explican en Palacio, era evitar que se abrieran algunos flancos recurrentes para el Ejecutivo y, sobre todo, dar una señal de que, en medio de las críticas hacia su gestión, el Gobierno comienza a 'mostrar resultados, tareas logradas' en este segundo tiempo.

Es, de hecho, uno de los puntos que se discutieron en el comité político ampliado del día miércoles, del que varios timoneles oficialistas salieron con la impresión de que La Moneda se está jugando 'el todo o nada' con su propuesta de pensiones.

Así lo ve, por ejemplo, la presidenta de la FRVS, Flavia Torrealba. 'Con esta reforma nos jugamos el inicio del nuevo trato con la ciudadanía. Si se logra sacar adelante, con altos niveles de aceptación ciudadana y consensos con las fuerzas políticas democráticas, vamos a poder avanzar en un acuerdo constitucional más sólido, porque este logro será la evidencia de que el Gobierno está habilitado para llevar adelante grandes transformaciones', dice.

2 Timing cuidadosamente evaluado

El momento tampoco era casual. Con la creciente desaprobación que enfrentan el Gobierno y el Presidente en todas las encuestas, llegando incluso a cifras históricas, en La Moneda consideraban urgente anunciar una medida que significase un golpe de timón y que, al menos, garantizara una pausa en medio de días complejos.

Y es que las últimas semanas han estado marcadas por las interminables rencillas entre las dos coaliciones del oficialismo, que se encuentran en un constante 'tira y afloja' sobre qué rumbo debe tomar el Ejecutivo.

Por lo mismo, a pocos días de que se realizara el tan anunciado 'cónclave oficialista' era importante ponerle paños fríos.

También, el anuncio resultó ser una jugada exitosa para La Moneda, pues —conscientes de que Karol Cariola caería, tarde o temprano, como carta para presidir la mesa directiva de la Cámara de Diputados— permitió amortiguar la exposición pública de esa derrota, que deja al Gobierno en una compleja situación para sacar adelante su agenda legislativa.

Pero no es todo. La reforma previsional, además, se da en un momento clave para el Ejecutivo, luego de que la ministra del Interior, Carolina Tohá, anunciara pocos días antes un 'compromiso transversal por la seguridad'. De hecho, el viernes por la tarde, los distintos timoneles del oficialismo se reunieron en las inmediaciones de esa cartera para trabajar más a fondo la iniciativa. De resultar exitosa, aseguran algunos de ellos, podría significar que el Gobierno mejore su aprobación, dado que estarían abordando 'dos grandes urgencias sociales' o prioridades ciudadanas.

3 Guiño a las dos coaliciones

Al igual como ocurrió con la reforma tributaria, el anuncio de la reforma previsional fue celebrado transversalmente en el oficialismo. Y eso, aseguran algunos dirigentes del sector, se debe a que la propuesta se expresa el sentir de ambas coaliciones.

Por un lado, destacan que la reforma cumple con uno de los compromisos 'transformadores' del programa de gobierno, impulsado por Apruebo Dignidad, que es poner fin a las AFP; por el otro, aseguran, se ajusta a las preocupaciones del Socialismo Democrático, dado que 'no desfonda el sistema financiero ni genera mayor incertidumbre económica'.

En ese sentido, reconocen en el Gobierno, fue clave el trabajo coordinado entre los ministros Mario Marcel y Jeannette Jara, donde cada uno 'se dedicó a lo suyo', permitiendo una simbiosis entre ambos lineamientos.

Mientras que la titular del Trabajo se dedicó de lleno al tema de las pensiones, dada su experiencia y conocimiento al haber sido subsecretaria de Previsión Social durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet, Marcel fue el hombre a cargo del componente financiero y de la construcción de una estructura firme, que 'no desacople el sistema en su conjunto'.

4 Flancos abiertos: en las empresas y la calle

Aunque el anuncio de la reforma tributaria logró dejar contentos a varios en el mundo político, sobre todo a aquellos que forman parte de las coaliciones oficialistas, la propuesta del Gobierno no fue bien recibida ni en el mundo empresarial ni entre en los movimientos sociales.

La asociación de AFP, por ejemplo, calificó la reforma como un 'retroceso'. 'Las personas han sido claras en señalar que desean mantener la libertad de elección y la capitalización individual para la nueva cotización, porque entienden que ese 6% les pertenece, que es producto de su trabajo y que, como tal, les permitirá aumentar su ahorro futuro', dijo su presidenta, Alejandra Cox.

A esos cuestionamientos se sumó el movimiento 'Con mi plata no', liderado por el abogado Francisco Orrego, quien sostuvo que 'el Gobierno no está escuchando a los trabajadores'.

Pero la nota sorpresiva la puso la coordinadora No+AFP, que también rechazó la reforma. 'El Gobierno sin duda que quiere mejorar las pensiones, pero también quiere mantener y aumentar el mercado de capitales', señalaron a través de un comunicado, firmado además por el exsuperintendente de pensiones Álvaro Galleguillos; Cenda y la Fundación Sol.

Así las cosas, no son pocas las interrogantes que se abren. La más relevante, tal vez, es si acaso el Gobierno está tomando nota sobre lo que quiere la ciudadanía. Para muchos, el anuncio de la reforma solo confirma una señal de que, tras el rechazo a la propuesta del nuevo texto constitucional, grandes lecciones todavía no se sacan.

5 Congreso ¿un segundo plebiscito?

Pero si de desafíos se trata, la principal valla que deberá sortear la reforma previsional será en el Congreso.

Y es que, por el momento, la propuesta del Gobierno no estaría contando con los votos de varias bancadas. Algunas más evidentes que otras, como es el caso de Chile Vamos y el Partido Republicano, que ya han manifestado abiertamente su rechazo al nuevo modelo para las pensiones.

Una decisión que se debe, en buena medida, a la falta de trabajo prelegislativo que se les acusa a los ministros del comité político: Marcel, Uriarte y Jara. Pero, también, al subsecretario de Previsión Social, Christian Larraín.

Incluso, algunos en Chile Vamos aseguran que por más que le presentaron ciertos puntos para que el proyecto contase con su respaldo, los intentos fueron en vano. 'Muy similar a lo que ocurrió con la reforma tributaria', dicen, pues suele ocurrir que 'el Gobierno llega enamorado de sus propuestas'.

A ellos, además, se estaría sumando el Partido de la Gente (PDG), quienes hace pocos días, antes del anuncio del Presidente Gabriel Boric, sellaron un acuerdo por reforma previsional con las bancadas de Chile Vamos y Republicanos.

La duda ahora está en qué decisión tomará la DC, considerando que —hasta ahora— le ha generado varios dolores de cabeza a La Moneda en el Congreso.

Eric Aedo, presidente de la bancada falangista, señala que 'la primera aproximación que tenemos es positiva, pues creemos en la necesidad de esta reforma'.

Destaca, a su vez, que varios de los puntos que como bancada les plantearon a la ministra Jara y al subsecretario Larraín fueron recogidos, como la libertad de elección y elementos de solidaridad. Sin embargo, advierte que antes de manifestar la postura final de su partido, es necesario que exista una gran discusión en torno al destino del 6% de las cotizaciones y sobre cómo se efectuará la transición al nuevo sistema.

De todos modos, la falta de respaldo no es el único obstáculo que podría enfrentar la reforma. Y es que, con la caída de Karol Cariola como próxima presidenta de la testera, todo pareciera indicar que la mesa directiva de la Cámara podría pasar a manos de la oposición, lo que dificultaría aún más el éxito de la medida.

Algo que, para muchos, podría ser muy perjudicial para el Gobierno, pues arriesga a que esto termine siendo un segundo plebiscito.

Recuadro
- En medio de las críticas hacia la gestión del Gobierno, el anuncio de la reforma pretendía mostrar resultados.

- Para su aprobación, la propuesta necesita al menos 78 votos en la Cámara Baja, independiente de la cantidad de diputados que estén presentes en Sala al momento de la votación.
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Mario Mercier-