Los puestos de trabajo relacionados con la generación de energía limpia se duplicarán con creces para 2030. Así lo proyecta el informe 'Energy Technology Perspectives 2023', publicado por la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés).

El estudio estima que la cifra actual de 6 millones de empleos aumentará a casi 14 millones en siete años más, pronóstico basado en un crecimiento industrial y laboral más rápido en las próximas décadas, a medida que avanzan las transiciones hacia energías renovables.

Estos nuevos puestos de trabajo estarán vinculados a vehículos eléctricos, energía solar fotovoltaica, eólica y bombas de calor.

Proyectos

Este mercado se postula como la industria emergente con mayor proyección, impulsando una ola de inversión que fluirá hacia una amplia variedad de industrias y creará empresas de energías limpias que tratarán de ofrecer algo distinto para diferenciarse del resto. Al respecto, el informe calcula que este mercado moverá unos US$ 650 mil millones a nivel global hacia 2030.

De los proyectos de fabricación anunciados en el mundo para energía solar fotovoltaica, solo el 25% está en construcción, según el estudio. Respecto a los vinculados a baterías, la cifra alcanza a 35%, y a electrolizadores, menos del 10%.

China es el país que presenta mayor avance en la implementación de sus proyectos; por ejemplo, 25% en los relacionados a energía solar fotovoltaica y 45% en los de fabricación de baterías. En EE.UU. y Europa, en tanto, menos del 20% de las fábricas de baterías y electrolizadores anunciados están en construcción.

En Chile

Según proyecciones de Acera, durante la última década la industria ERNC ha generado sobre 17 mil puestos de trabajo en el país —entre empleos permanentes y transitorios— asociados al desarrollo, construcción y operación de centrales.

'Si se considera que para retirar el carbón de la matriz de generación eléctrica al año 2030 se requiere aumentar en un 130% la capacidad instalada de ERNC actual, es posible estimar que para ese período se generarán unos 22 mil nuevos empleos', dice Felipe Gallardo, director de Estudios de Acera.

'Si el país avanza en la electromovilidad o en el desarrollo de la industria del hidrógeno verde, se podría generar una demanda relevante de este tipo de trabajadores, que probablemente no podrá ser satisfecha a partir del mercado laboral existente. Es evidente que disponer de un número adecuado de técnicos y profesionales es una de las condiciones habilitantes para efectuar el proceso de transición energética del país de manera oportuna', advierte.