Una nueva conmemoración del día del Trabajador se vivió ayer en todo el país, fecha en la que se recuerda el origen de la lucha por la jornada laboral de ocho horas en Estados Unidos, a finales del siglo XIX.
El dirigente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) Ñuble, Luis Sánchez, quien fue el orador de la jornada de ayer en el paseo Arauco, manifestó que “este 1º de mayo no solamente nos juntamos a conmemorar, también estamos levantando las banderas de las luchas que han quedado inconclusas. En este momento histórico necesitamos urgentemente hacer un llamado a la ciudadanía a que se involucre activamente en el proceso Constituyente que estamos viviendo, pues la oportunidad cierta de poder terminar con la Constitución del dictador Pinochet está una vez más a la mano, y solo la conciencia del trabajador podrá abrir la puerta para generar los cambios que Chile necesita”, aseveró.
Sánchez agregó que en el nuevo texto que emane de este segundo proceso, se debe ‘ampliar la mirada’.
“Debemos consagrar la huelga como un derecho fundamental de los trabajadores, no solamente en el marco de la negociación colectiva, sino en cualquier momento que sea necesaria”, dijo.
Destacó algunas ganancias del último tiempo, como la recién promulgada ley de las 40 horas, “la cual tendrá una implementación gradual, para que las empresas se puedan ir acostumbrando e implementen estos nuevos sistemas de trabajo, sin perjudicar en sus salarios a los trabajadores”, sostuvo.
Como CUT, añadió, “nos preocupa que cuando se quisieron implementar leyes y ajustes para invertir en previsión social, como lo hizo el actual gobierno con su recientemente rechazada reforma tributaria, hubo actores políticos que ni siquiera quisieron discutir ese proyecto, el cual venía a aumentar la PGU, traía un aumento importantísimo en la contratación de nuevos agentes de seguridad que tanto Chile demanda hoy en día, y otros ítemes, condenando al pueblo de Chile a seguir viviendo de la precariedad en la hora de la jubilación”, advirtió.
Respecto de la creación de un nuevo sistema previsional, Sánchez sostuvo que “todavía estamos en deuda. Los trabajadores no podemos seguir esperando, necesitamos un nuevo sistema que entregue pensiones dignas a los trabajadores, que termine con el negocio de las AFP, y que permita al Estado entregar las pensiones a través de nuevos mecanismos y nuevas instituciones que realmente ofrezcan ganancias a los trabajadores, y no como lo vemos hoy día”, sostuvo, además de rechazar como organización la propuesta de nuevos retiros previsionales, “ya que hoy día los que tienen fondos para retirar en un eventual sexto retiro solo son las clases más pudientes, afectando a los trabajadores que menos tienen, con las posibles alzas que se vendrían”, planteó.
Constructores de paz
En tanto, durante la liturgia de conmemoración del 1º de mayo celebrada por el mundo católico, el obispo de Chillán, Sergio Pérez de Arce, sostuvo que “éste es un día significativo, porque valoramos y agradecemos el trabajo humano, pero también por todos los hombres y mujeres que han luchado para que los trabajadores y trabajadoras tengan mejores condiciones de vida y puedan ser respetados en su dignidad. Eso tiene mucho valor, y el significado fundamental de este día”, afirmó.
El obispo Pérez de Arce llamó también “a que fueran artífices y constructores de paz (los trabajadores), porque hoy día tenemos que ser trabajadores de paz, porque la sociedad lo necesita, porque lo necesitamos en nuestros ambientes, en nuestros lugares de trabajo, en nuestros colegios. No solo tenemos que pedir que nos den seguridad, paz, sino que todos tenemos que crear un mundo más fraterno, más cordial, más en confianza de unos con otros, y ése es el trabajo por la paz que cada uno tiene que hacer en su lugar”, aseveró la autoridad eclesiástica local