La inmobiliaria Norte Verde, ligada a la familia Bascuñán —originaria de la Región de Coquimbo— sigue expandiéndose en la Región Metropolitana y desarrollará su primer proyecto en la comuna de la Florida.
Se trata del “Edificio Vicuña Mackenna 6896”, cuya inversión supera los US$ 28 millones. La iniciativa se ubica en el Paradero 12 de Vicuña Mackenna, próxima a la estación Bellavista La Florida de la Línea 5 de Metro y cerca de servicios, centros comerciales —Mall Plaza Vespucio y Florida Center— y el Hospital La Florida, entre otros. La torre se emplazará en un terreno de 2.000 metros cuadrados y tendrá una altura de 13 pisos, con departamentos de entre 2.500 UF y 3.200 UF.
Roberto Bascuñán, gerente general Inmobiliaria Norte Verde, comentó que “el proyecto se encuentra actualmente en la etapa de venta en blanco y tiene previsto iniciar la construcción a fines de 2023”. Destacó que en solo un mes comercializaron el 23% de los departamentos, lo que estuvo impulsado por un “plan de beneficios que estamos ofreciendo para apoyar a quienes quieren invertir en momentos de restricciones financieras”, señaló.
Bascuñán afirmó que “vemos a La Florida como una comuna con un gran potencial para el desarrollo inmobiliario en altura, por su crecimiento demográfico, demanda de viviendas y su infraestructura en constante crecimiento. Es una zona donde queremos proyectarnos”.
Actualmente, la inmobiliaria cuenta con un portafolio de 21 proyectos en distintas etapas de desarrollo, con una inversión asociada que bordea los US$ 300 millones. Esas iniciativas se ubican en Santiago Centro, Ñuñoa, Providencia, San Miguel, Estación Central, además de las que posee en Coquimbo y La Serena.
Preocupación
Roberto Bascuñán también analizó el comportamiento del mercado inmobiliario en medio de una economía débil. “Es preocupante. El año pasado fue especialmente complejo, con una caída histórica en las ventas de viviendas nuevas. En Santiago se comercializaron aproximadamente 16 mil unidades, la mitad de lo que se vende en un año normal”, indicó.
Añadió que “si bien se espera que 2023 sea levemente mejor, con estimaciones de entre 20 mil y 22 mil unidades anuales, aún estará muy por debajo de los niveles previos a la pandemia. El escenario no es alentador y se debe a varios factores, incluyendo la inflación, las altas tasas de interés y, particularmente relevante, el cambio en las condiciones financieras y la restricción impuesta por la banca, lo que no contribuye a reactivar el negocio. Actualmente, los bancos están ofreciendo financiamiento para proyectos inmobiliarios con tasas UF+10, algo nunca antes visto”.
Unido a ello, afirmó que los desistimientos de compraventa de viviendas “han aumentado a casi 30%, el crédito especial para la construcción está llegando a su fin y se espera un continuo incremento en los precios”.
Aseguró que “como resultado de esta situación, las inmobiliarias se encuentran paralizadas, sin adquirir terrenos ni iniciar nuevos proyectos”. Aunque dijo que “iniciativas como el fondo de garantía para préstamos hipotecarios (Fogaes) podrían brindar cierto apoyo, no son suficientes. Si deseamos reactivar el mercado inmobiliario, se requiere un impulso adicional”.
En esa línea, señaló que es clave “tomar medidas para incentivar la inversión y flexibilizar las condiciones financieras, de manera que se reactive la demanda y se estimule la actividad de las inmobiliarias”.