Pais:   Chile
Región:   Metropolitana de Santiago
Fecha:   2024-03-24
Tipo:   Prensa Escrita
Página(s):   B12
Sección:   
Centimetraje:   11x27
El Mercurio
¿Seguir la moda o ir por un viejo conocido?
En las últimas semanas, el alza en la cotización de las criptomonedas ha generado revuelo entre los inversionistas. De manera innovadora, ellas surgen el 2008 con el Bitcoin, primera moneda descentralizada, que no opera bajo la jurisdicción de ningún banco o gobierno central, sino que en una red de computadoras distribuidas como blockchain.
Su crecimiento ha sido simplemente exponencial bajo dos características antagónicas: rentabilidad y riesgo. El precio de un bitcoin en sus inicios rondaba los 0,00076 dólares. Hoy, su valor se estima cercano a los 72.000 dólares. A esto se suma su aprobación para cotizar en bolsa, a través de ETF regulados. En contraste, se alerta del alto riesgo asociado a ellas, dado por una alta volatilidad, característica que pudimos constatar en tiempos de pandemia, y los casos de fraude producto de su falta de regulación formal.
En el otro extremo de las criptomonedas encontramos al viejo conocido: el índice S&P 500, que incluye las 500 empresas líderes que cotizan en la bolsa de Estados Unidos. Históricamente, el índice S&P 500 ha sido uno de los mejores indicadores de desempeño de las principales empresas estadounidenses y, por analogía, también del mercado de valores mundial. El fondo —que fue creado en 1957 por Standard and Poor's— es uno de los más valorados en el mundo por su diversificación. Además, para pertenecer a él, la empresa debe tener, entre otros factores, una capitalización no ajustada superior a 14,5 mil millones de dólares y ganancias positivas. En otras palabras, certeza dada por su apego a las conocidas condiciones del mercado.
En este entendido, criptomonedas y S&P 500 nos llevan a la pregunta del millón: ¿En materia de inversión, es posible en realidad tener vehículos que logren ganarle al mercado? Invertir en el viejo y conocido S&P 500 es seguir el mercado. Si al mercado le va bien, al inversionista también, y si le va mal, se pierde con él. Mientras que invertir en criptomonedas, en muchos casos, implica intentar ganarle a las lógicas del mercado, ya que responden a dinámicas distintas, y esa tentación es grande. La respuesta a esta pregunta fundamental es ciertamente discutible. Sin embargo, solo es posible afirmar con certeza que, en la perspectiva de inversiones a largo plazo, nadie ha logrado quebrarles la mano a las viejas lógicas del mercado. Solo es posible mantener la ilusión de hacerlo cuando hablamos de corto y mediano plazo.
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Alejandro Brücher Cofounder & Head of AI Holdo -